Cómo se aborda el cáncer durante este estado de alarma
El nuevo brote de Covid-19 ha impactado de manera significativa en muchos aspectos de nuestra vida diaria. La atención médica no se detiene, y menos aún para las personas con cáncer, para los que se han implementado nuevos procesos que permiten atenderlas durante este momento complicado, priorizando el tratamiento para aquellas con necesidades más inmediatas. ¿Cómo se realiza el seguimiento médico en estos casos?
Si se está recibiendo tratamiento de cáncer, el Ministerio de Sanidad aconseja llamar al médico antes de la próxima cita para que le indica qué recomendaciones seguir. Según las autoridades sanitarias españolas, los sistemas de atención médica van adaptando sus actividades a la situación por Covid-19, lo que podría modificar el lugar, la forma del tratamiento y las citas de seguimiento.
Esto quiere decir que, en ciertas circunstancias, el médico podría considerar el hecho de faltar a alguna sesión de tratamiento frente al riesgo de exposición a una infección. Las pautas que se seguirán tienen que ajustarse a “una valoración muy cuidadosa del riesgo-beneficio”, reconoce el Doctor Jesús García-Foncillas, director del Instituto Oncohealth del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz de Madrid. Esto significa que la decisión debe ser “muy individualizada y en función del momento en el que se encuentra cada uno: diagnóstico, valoración del tratamiento, etc.”.
También puede ocurrir que se demoren algunas citas de seguimiento de rutina o que se programen citas por telemedicina. En líneas generales, la manera como se aborde dependerá de factores como si la persona está con tratamiento oncológico o no o del riesgo de inmunosupresión. Desde Oncohealth Institute cuentan con equipos multidisciplinares que hacen más fácil realizar valoraciones no presenciales en las que intervienen todos los equipos que intervienen en el diagnóstico y seguimiento de cada tipo de tumor. Y, algo fundamental durante estos días: los pacientes no solo reciben un seguimiento sobre los tratamientos de quimioterapia o radioterapia que deben seguir, también cuentan “con una unidad de psico-oncología” para ayudar a los pacientes. La suma de esfuerzos frente a distintos tipos de cáncer permite ofrecer de esta manera asesoramiento psicológico.
Cáncer y síntomas de coronavirus
Si se está recibiendo tratamiento oncológico y tiene síntomas de coronavirus, Sanidad recomienda:
- Contactar con el servicio de oncología donde le atienden y al 112 si aparece cualquier síntoma o malestar, informando siempre de que recibe tratamiento oncológico.
- Acudir a urgencias si hay fiebre, independientemente de otros síntomas, para que valoren la situación, la necesidad de pruebas, el tratamiento específico o ingreso hospitalario si es necesario.
- Es importante no dejar de ir al hospital si es necesario. En ese sentido, los hospitales de Quirónsalud disponen de circuitos limpios para atender a todos los pacientes que requieren atención médica que no esté relacionada con Covid-19, como cáncer, diabetes, alergias y asma, enfermedades cardiovasculares, enfermedad renal crónica, alteraciones conductuales, etc.
Sanidad informa que se puede ir al hospital siguiendo las siguientes recomendaciones:
- Informar de las patologías crónicas, la medicación y el tratamiento que se está recibiendo.
- Lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón.
- Evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca.
- Cubrirse la boca y la nariz con el codo flexionado al estornudar o toser.
- Llevar ropa cómoda, que se pueda lavar a 60º.
- Usar pañuelos desechables y tirarlos después de usar.
- Evitar las aglomeraciones en admisión, en la sala de espera, el comedor, la cafetería, la cola del baño.
- Mantener una distancia de al menos 1-2 metros con otras personas.
- No llevar joyas ni bisutería ni metales.
- No llevar sujetador.
El médico, frente a una persona con cáncer y sospecha de coronavirus, decidirá qué tratamiento es mejor llevar a cabo. Para García-Foncillas, “debe ser muy cauto a la hora de iniciar un tratamiento de quimioterapia que pueda ser potencialmente inmunosupresor”. En los casos en los que sea posible, puede demorarse el inicio del tratamiento oncológico “al menos dos semanas con reevaluación para evitar administrar el tratamiento en caso de poder ser positivo para el coronavirus”. Es necesario estudiar cada caso particular para analizar el riesgo-beneficio de realizar pruebas diagnósticas y tratamientos.
Qué hacer para evitar el contagio
Las recomendaciones de Sanidad para evitar el contagio en personas con cáncer son las mismas que para la población general, es decir, evitar salir de casa salvo que sea imprescindible; lavarse las manos con agua y jabón frecuentemente; evitar tocarse ojos, nariz y boca; cubrirse la boca y la nariz con el codo al estornudar o toser y usar pañuelos desechables.
Además, añade otras pautas:
- Cuidar la higiene y mantener las rutinas y horarios.
- Seguir una alimentación saludable, evitando el consumo de productos procesados, altos en azúcares añadidos, grasas y sal.
- Beber agua.
- No fumar ni beber alcohol.
Cáncer y coronavirus
Por el momento no existe evidencia científica que indique que el coronavirus empeore la enfermedad del cáncer pero sí podría asociarse a un cuadro clínico del Covid-19 más severo, sobre todo si el paciente es mayor y tiene otras patologías, tal y como ocurre con otras infecciones virales respiratorias como la gripe, informa la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). Según un estudio realizado a nivel nacional en China los pacientes con cáncer tienen por ejemplo una “mayor necesidad de ventilación invasiva y una probabilidad mayor de eventos severos que los pacientes sin cáncer”, reconoce García-Foncillas.
Sí es cierto que los enfermos oncológicos forman parte de un grupo especialmente vulnerable porque los tratamientos como la quimioterapia afectan al sistema inmunitario, a las defensas, y, por tanto, están más expuestos a la infección. Un análisis global realizado en la población china ha demostrado que aproximadamente el 1-2% de pacientes con Covid-19 tenían una historia previa de cáncer (sobre todo de pulmón), con una incidencia de un 0,29% más alta que en el resto de personas.
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