CCOO y el 8M
Por segunda vez en apenas 10 días PIDE ataca, sin que exista provocación previa de ningún tipo, a Comisiones Obreras. La primera ocasión fue con motivo del lanzamiento de uno de sus boletines en el que nos acusa de traicionar al colectivo de interinos por haber firmado un Acuerdo de Estabilidad en marzo de 2017 que supondrá la conversión en los próximos años de más de 500.000 puestos de trabajo temporales en fijos, 150.000 de ellos en el sector educativo.
Dicho acuerdo vino acompañado de negociaciones en todas las mesas sectoriales de la administraciones públicas por parte de los sindicatos firmantes (CCOO, UGT y CSIF) para que se adaptase temporalmente el modelo de acceso a la función pública con la instauración de una transitoria, pruebas no eliminatorias, más peso de la experiencia, y más temas a elegir. Muy desnortado debe andar un sindicato para estar en contra de la estabilidad laboral que este acuerdo defiende.
El segundo ataque vino este jueves, con la publicación de un artículo de opinión en este mismo medio, en el que tras tratarnos como “organización sindical tradicional que en su momento luchó por la igualdad de género”, nos acusaba de “intentar minimizar el impacto de la huelga contraprogramando y haciendo una convocatoria propia de solo dos horas”. Respecto a la primera acusación, CCOO se declara en sus propios estatutos un sindicato feminista, todas sus estructuras están implicadas en la lucha por la desigualdad laboral, la brecha de género, la violencia machista…, en todas y cada una de las empresas y administraciones de este país, todos los días del año, desde hace más de 40 años. Esta huelga CCOO la ha trabajado desde hace meses centro a centro, empresa a empresa. ¿Puede el sindicato que nos critica decir lo mismo?
La segunda acusación se sostiene tan poco como la primera. CCOO no ha contraprogramado ni boicoteado nada. Parafraseando al mencionado sindicato “la huelga afectaba a todos los órdenes de la vida: laboral, de consumo, de cuidados, de estudiantes…”. CCOO convocó una huelga laboral de dos horas y animó a todas y todos sus delegados sindicales, sus afiliadas y afiliados, y sus simpatizantes, a participar en el resto de huelgas convocadas: de consumo, de cuidados, de estudiantes… En cada acto de los programados, ya fueran concentraciones o manifestaciones, había delegadas y delegados de CCOO, afiliadas y afiliados de CCOO, simpatizantes de CCOO.
¿Dónde estuvo PIDE en el día de la huelga? Desaparecido. Como lo estuvo en la firma del acuerdo del que hablábamos. Y ese es el problema, se acercan las elecciones sindicales y ese sindicato tiene la imperiosa necesidad de ganar notoriedad, aunque sea a costa de cargarse la unidad de acción sindical, que hasta este momento era un hecho en la Mesa Sectorial de la Educación extremeña.
CCOO y otras organizaciones consiguieron que este 8 de Marzo hicieran el paro de dos horas casi seis millones de trabajadoras y trabajadores de este país, en 8 de cada 10 empresas se hizo el paro. En Extremadura un 75%. Un éxito de movilización que no puede ser empañado por los intereses electoralistas de ninguna organización sindical. Nuestra más sincera enhorabuena a todas y todos los que pararon para luchar por los derechos de las mujeres, y a todos los medios que, como este, contribuyeron con la difusión de los actos al éxito de la huelga.
