Exdirector comercial relaciona su imputación con denunciar a Caval por impago
En el juicio en la Audiencia Provincial de Badajoz, ha manifestado este jueves que efectuó una reclamación civil por los talones impagados correspondientes a 2009 y parte de 2008.
Días después, ha dicho, recibió una denuncia criminal por parte de los socios de la cooperativa de Valdelacalzada (Badajoz), que también vino acompañada por distintas llamadas telefónicas amenazantes.
Tanto a Manuel Corrales como a su mujer, Carmen Teixeira, se les acusa de delitos de apropiación indebida, entre otros, solicitándose en el caso del primero penas que podrían llegar hasta los 10 años, y hasta seis respecto a su cónyuge.
Corrales también ha manifestado que cada departamento de la agrupación era autónomo y, por tanto, cada uno tenía sus propias responsabilidades, coincidiendo así con las palabras de ayer del exgerente de Caval Manuel García, principal acusado en este juicio.
Ha coincidido a su vez al considerar como “nefasta” la gestión de la cooperativa por parte de las personas que sucedieron a Manuel García al frente de las funciones de gerencia.
Una peseta por kilo
Por otro lado, Corrales ha dicho que cobraba una comisión de una peseta por cada kilo de fruta vendido, una cantidad mucha más baja de la que le ofrecían en otras empresas, por lo que meditó en varias ocasiones dejar Caval.
Además, ha declarado que daba cuenta de todos los gastos generados por sus desplazamientos al departamento de Contabilidad de Caval, y tras el cobro firmaba un “recibí”.
Aunque pudo aconsejar en ciertas actuaciones, ha dicho que prácticamente no pisaba las oficinas de Caval, pues no poseía “ni llaves” de las instalaciones y, ha añadido, mucho menos pudo apropiarse de talones de la cooperativa.
Durante el juicio también ha declarado su mujer, Carmen Teixeira, que ha lamentado la situación de “indefensión” sufrida en su primera declaración por estos hechos, pues entre otros se le citó sin información de los motivos.
