La Confederación Guadiana abre una licitación para la comercialización del camalote como biomasa

La Confederación Hidrográfica del Guadiana informa de que ha comenzado el trámite de licitación para autorizar el aprovechamiento de parte del camalote extraído para su uso como biomasa y su destrucción por parte del sector industrial.

El aprovechamiento se enmarca dentro de la estrategia que se desarrolla para su erradicación y control. Incluye condiciones “muy estrictas” para asegurar que el transporte del material y su procesado se realicen sin riesgo de propagación y que el producto final, es decir, el gas y la celulosa, no permita la reproducción de la planta invasora. 

La delegada del Gobierno en Extremadura, Yolanda García Seco, confirmó que la Unión Europea ha concedido una autorización especial para que determinadas empresas puedan retirar el camalote y utilizarlo en su propia generación de energía como combustible de biomasa. Ha aclarado que vender u obtener una rentabilidad de plantas o especies invasoras está prohibido. 

Condiciones del pliego

La Confederación explica en un comunicado que el pliego que ha salido a licitación establece en qué condiciones se puede autorizar a una empresa interesada el posible aprovechamiento del camalote que se extrae del río Guadiana para su destrucción mediante un determinado procesamiento industrial.

En ningún caso se realizará la comercialización de la planta ya que el fin último del aprovechamiento es únicamente al objeto de colaborar en su erradicación. “Es un aprovechamiento puramente de oportunidad, de tal forma que la empresa que esté interesada debe tener en cuenta que es posible que el suministro de material desaparezca o se interrumpa”, se explica en el comunicado.

Las instalaciones donde se realice el procesado deberán encontrase dentro de las zonas ya afectadas por camalote, es decir, las vegas Altas y Bajas.

Se hará cargo de los costes de transporte, de los tratamientos preparativos como los triturados, compactados y secados, así como la destrucción de restos, los gastos de medición, de laboratorios y pruebas, y los controles de trazabilidad.

Destrucción de la especie

Se asegurará el compromiso y el objetivo de destrucción de la especie, y el adjudicatario deberá disponer como mínimo de un equipo de extracción, asumiendo esos costes.

Se recogen dos lotes, una para el tramo A, desde Villanueva de la Serena a Mérida, y otro para el B, de Mérida a Badajoz.