¿Puede un alcalde negar el uso de una sala de prensa a la oposición?

Una sala de prensa de un ayuntamiento, en este caso el de Mérida ¿puede ser vetada para su uso por parte de concejales de la oposición? ¿Sólo puede utilizar ese espacio y esos medios el equipo de gobierno?

Esta es una pregunta que desde hace casi dos años viene planteando el concejal del Siex Antonio Vélez al alcalde de Mérida y senador de España Pedro Acedo en plenos municipales, juntas de gobierno, por escrito… y dos años después aún no tiene respuestas.

De modo que con esa negativa, cada vez que el citado concejal desea informar a los ciudadanos de sus gestiones, a través de los medios de comunicación, busca un bar del centro de Mérida, se gasta unos 20 euros en cafés y botellas de agua, y en ese escenario recibe, informa y responde a las preguntas de los periodistas, mientras la sala de prensa municipal está cerrada, vacía, a la espera de que algún miembro del equipo de gobierno tenga a bien convocar a los periodistas para informar de sus actividades.

Tras dos años de preguntas y no respuestas, Vélez cree que esa negativa es una afrenta a los concejales elegidos por los vecinos, a los periodistas que van a un bar a hacer su trabajo y a los ciudadanos que reciben posteriormente esa información. Y ha decido denunciar en los juzgados esa negativa al considerar incluso que pudiera constituir un delito de prevaricación.