La Red del Tajo/Tejo critica la lamentable gestión del tramo extremeño

La Red del Tajo/Tejo, integrada por colectivos españoles y portugueses en defensa de este río, ha reclamado un plan hidrológico que permita la recuperación del río y sus afluentes, con medidas como un “verdadero” régimen de caudal ecológico en Aranjuez, Toledo y Talavera de la Reina. Esta demanda ha sido una de las conclusiones de las VIII Jornadas por un Tajo Vivo celebradas durante el fin de semana en el municipio abulense de Candeleda, en las que un centenar de representantes de las asociaciones en defensa del Tajo han denunciado el “sometimiento” de la gestión del río a los intereses de los beneficiarios del trasvase Tajo-Segura. También han denunciado que se aprueben trasvases este año entre el Tajo y el Segura pese a que las precipitaciones en la cabecera han sido “muy escasas” y las reservas de los embalses de esta zona se encuentran “al veinte por ciento” de su capacidad, han señalado hoy en una nota de prensa.

Tramo extremeño Han destacado la “lamentable” gestión del Tajo extremeño, “en manos de las hidroeléctricas”, que genera impactos “importantes” y “alteraciones graves” en el régimen de caudales, y han demandado la revisión del Convenio de Albufeira, para que el régimen de desembalses semanales y trimestrales que España debe cumplir “facilite regímenes de caudales ecológicos” en el tramo portugués. Los colectivos que participan en la red han anunciado, además, que presentarán alegaciones al borrador del nuevo plan hidrológico, en periodo de información pública hasta el próximo 30 de junio y que, una vez aprobado, establecerá las líneas maestras de gestión del Tajo hasta el año 2021. A su juicio, el borrador del plan evidencia la “falta de compromiso” de las administraciones competentes con la recuperación del río y su ciudadanía, además de que “desprecia” los valores y necesidades del río y sus afluentes y mantiene unos caudales ecológicos “mínimos” y la descatalogación del “90 por ciento” de las reservas naturales fluviales contenidas en el plan de 2014. La Red del Tajo ha rechazado, además, que se “perpetúen” las “grandes” presiones que afectan al río, como la detracción de “hasta dos terceras partes” de los caudales de cabecera que se trasvasan a la Cuenca del Segura, o la “sobreexplotación” y “falta de depuración integral” de todas sus aguas, con “especial incidencia” en los ríos madrileños.