“Tortura no es cultura”: protesta contra los Toros de Coria, la cuarta fiesta más cruel de España para los animalistas
La lista roja del maltrato animal coloca a los Toros de San Juan de Coria en la cuarta fiesta más cruel de España, por la duración del evento y por el trato que se les da a los astados. Solo por detrás del Toro de la Vega, el toro enmaromado y el toro júbilo.
Un año más diferentes colectivos ecologistas, protectoras de animales y partidos alzarán la voz contra lo que consideran un gesto de maltrato animal. Será este lunes, a las 19,00 horas, en la Plaza de España de Mérida.
Mucho ha llovido desde que Vicky Moore, una activista británica, se plantara en Coria para protestar por el maltrato a los toros que corren por las calles. Esta animalista fue embestida en 1995 por un morlaco mientras grababa con su cámara las escenas de la fiesta, con el objetivo de mostrarlas luego al resto de mundo. Murió tiempo después por las heridas sufridas.
Antaño se disparaban alfileres a los toros, una tradición ahora prohibida. Aunque curiosamente, el tiro de gracia con el que se sentencia a muerte al toro, rodeado por la algarabía de público, se autorizó oficialmente bajo el gobierno de Monago. El requisito es que el tiro se le debe dar en un callejón, algo que los colectivos animalistas dudan que se respete.
Los Toros de San Juan sacan durante una semana a media docena de reses bravas, que recorren las murallas mientras los mozos corren junto a ellas. Se trata de una fiesta declarada de Interés Turístico por la Junta, y que los canales especializados venden como un evento en el que disfrutar de “emociones fuertes” bajo un “profundo sabor taurino”.
Las voces en contra
Virginia Iniesta, vicepresidenta la Asociación de Veterinarios Abolicionistas de la Tauromaquia, quiere romper algunos de los mitos en torno a los toros de Coria. El primero, que no sufren porque ya no se les tiran dardos afilados.
La realidad, según comenta esta veterinaria, es que las reses “son perseguidas, hostigadas, e incluso golpeadas hasta su agotamiento, momento en que se les pega el tiro de gracia”. Advierte que su sufrimiento comienza con el transporte animal.
Insiste en que el toro no está preparado para el ejercicio que les instiga a realizar, y que como mamífero posee un sistema nervioso central, de manera que tiene sentimientos de miedo, angustia o estrés. Va más allá, y apunta a las últimas investigaciones de neurocientíficos de la Universidad de Cambrige, que hablan de que todos los mamíferos podrían tener conciencia de sí mismos.
El manifiesto ‘Suma tu voz por los toros de Coria’ manifiesto ‘Suma tu voz por los toros de Coria’ señala que “perseguir, acorralar, agotar y dar muerte de un disparo excepcionalmente legal desde 2012 a un toro no es una tradición: ”es fomentar la violencia, y eso es algo que nuestra sociedad tiene que cambiar“.
Entre los firmantes se encuentra la Plataforma en Defensa Animal Extremeña, los partidos Por un Mundo Más Justo, Equo y Adelante Extremadura, la Federación de Protectoras de Animales de Extremadura, PACMA, así como Coalición por Cáceres o la Plataforma ‘La Cultura no es Cultura’, entre otros.
“Los toros sí sufren”
Carmen Ibarlucea, de Equo, lanza otro mensaje: “Cuando se dice que un toro no sufre, se transmite la misma idea que dice un rico de un pobre”, transmite Ibarlucea.
Sus defensores argumentan que los vetones ya corrían dentro de las murallas de Coria detrás de los toros Antes de Cristo, siendo un tesoro inmaterial que no se puede cambiar. “Sin embargo los vetones adoraban a la diosa Ataecina, una diosa a la que ya nadie conoce en Coria. También dejaban que sus muertos fueran comidos por las aves carroñeras, pero ahora en Coria a nadie se le ocurriría hacer eso”, critica Ibarlucea en el manifiesto contrario a esta fiesta.
Con estas palabras insiste en que la vida cambia, la forma de celebrar las cosas cambia, y lo que reclama es un estilo “más respetuoso, más justo, más ético y más humano”. “La adrenalina del riesgo, sin hacer daño a un tercero, claro que es aceptable”.“Si quieren correr 11 días, que busquen otra manera de hacerlo”.
Desde el partido animalista PACMA, Olga Lama ha transmitido a este diario su defensa de la abolición de todo espectáculo cruel con animales, y no solo la retirada de subvenciones.
“La evolución de la sociedad debe comenzar por la evolución ética y moral. Pedimos a todos los nuevos ediles y alcaldes que avancen en este sentido, también en Coria. La cultura, la tradición y la diversión pueden darse sin necesidad de crueldad ni violencia, hacia nadie”.
Igualmente Fernando Cintas, de la Plataforma Defensa Animal Extremeña, señala que “la máxima educación para nuestros hijos es enseñarles respeto y el amor hacia un mundo mas igualitario”. “Mientras existan estas fiestas nacionales donde un animal es violentamente asesinado y lo sigan viendo niños, no podremos ser un país avanzado si no al revés vamos disminuyendo esos hijos el día de mañana al ver semejante violencia serán asesinos igual que ellos”.
“Ninguna tortura jamas sera cultura, ni ninguna fiesta nacional en el siglo XXI debería ser asesinar animales, mientras hayan esta aberraciones en nuestro país no dejaremos de luchar”, ha expresado.
