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“Zaida Cantera y el teniente Segura no han movido un dedo en este tema por sus compañeros”

David Thovar y Fernando Tello, ya en Madrid, pasan junto a un monumento a los bomberos

José L. Aroca

Fernando Tello y David Thovar, los dos exmilitares extremeños a los que el Ejército no quiso renovar, y que se han embarcado en una caminata de 400 kilómetros de Badajoz a Madrid para defender a compañeros que seguirán la misma suerte, llegaron este viernes a la capital española y participan el sábado en una protesta colectiva de la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME).

Salieron de Badajoz el pasado 11 de noviembre y han entrado este viernes por la mañana, tras caminar por la antigua carretera nacional V, durmiendo a veces en tiendas de campaña, otras en albergues municipales, y en algún caso recibiendo la enorme solidaridad de compañeros de milicia como Iván Ojido, de Talayuela, que les llevó a su casa a compartir mesa con su familia y donde también durmieron.

“Cansados, ha sido un sacrificio, pero satisfechos porque lo hemos conseguido”, explica a eldiarioex David Thovar, de Badajoz, para quien “ha acabado la lucha en lo físico, pero en lo moral va a continuar porque queda mucho por hacer”.

Uno de los primeros pensamientos de este excabo, recién llegado a las inmediaciones del hospital militar Gómez Ulla en Madrid, es acordarse de quienes frente a su empeño y el de David Tello, a quienes ya no va nada en el intento salvo la solidaridad puesto que no pueden volver a las Fuerzas Armadas, “lo que han buscado es un interés político”, en referencia a los también exmilitares Zaida Cantera y Luis Gonzalo Segura.

No han ayudado

“Mientras nosotros lo hacemos desinteresadamente, solo por la compensación de ayudar a los que todavía están dentro del Ejército, esas dos personas, pese a la fama y proyección que tienen, no han movido un dedo por este tema, no han tenido ni un pequeño gesto, ¿o tú has visto alguno?”, pregunta por teléfono desde Madrid.

“Ella ya lo ves, diputada nacional, y él también en política”.

El principal problema por el que han caminado David y Fernando es la normativa según la cual a los 45 años la clase de tropa de las Fuerzas Armadas si no han alcanzado la categoría ‘de carrera’ se van a la calle, con 600 euros al mes pero la prohibición de compaginarlo con cualquier otro trabajo en la Administración.

“Nosotros luchamos”, sigue Thovar, “porque ellos no pueden hacerlo”, y también por otras familias y profesionales que se consideran maltratados por las Fuerzas Armadas.

Este sábado la Asociación de Militares entregará una queja a la institución Defensor del Pueblo para que al menos se cumpla la normativa en el sentido de que antes de prescindir de ellos la milicia proporcione formación y titulación para que a esa edad tan mala, 45, puedan encontrar trabajo.

Luego llegará la vuelta a Extremadura. David Thovar en el paro en la ciudad de Badajoz, y Fernando Tello a seguir con la agricultura en Cordobilla de Lácara.

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