El jazz parece que es un tipo de música que solo se puede consumir en verano. Eso parece en Euskadi, donde la sequía del resto del año contrasta con la borrachera de conciertos que tenemos este mes de julio. Así que, no quedará más remedio que digerirlo, que sarna con gusto…
A Euskadi se la identifica por sus tres grandes festivales. Getxo, cuyo crecimiento se puede resumir con la presencia este año del gran Wynton Marsalis; el Jazzaldia de San Sebastián, el festival decano y con un elenco siempre variado para muchos gustos; y el siempre purista y académico Festival de Vitoria. Son los grandes reclamos para el turismo y el color que todo territorio necesita exhibir en esta época al gran público.
Pero, en paralelo, han surgido otras citas más caseras (o callejeras), en definitiva menos masivas. Es el caso del Jazzaharrean, el festival del Casco Medieval de Vitoria que este año cumple ocho años. Se celebra en algunos locales que –unos más, otros menos- durante el año programan conciertos y en esta época se confabulan para, a mayor o menor distancia, sobrevolar alrededor del jazz. El Parral, Gora, Bodegón, Elorza, Artium, Green Bay, Erdizka, Jango, plaza del Matxete y este año también Stone Head son los lugares donde se desarrolla el evento.
El arranque se produjo ayer martes, con Crudo Pimento y Hot Wok, dos bandas con gancho entre la concurrencia. Y terminará el día 12 con un concierto de Evita Mansfield, la artista de burlesque española más conocida. Será en el único local que se sale de las fronteras del Casco Viejo, en el Hell Dorado, uno de los lugares sagrados del rock en directo en Euskadi.
Con los años, el cartel se ha extendido en cantidad y en calidad de los conciertos, hasta alargarse durante diez días. Y ante todo, tiene una particularidad para tener en cuenta en estos tiempos de crisis: son gratis. Aquí está el cartel.
Es una propuesta un tanto alternativa al circuito oficial de festivales, hecha con modestia y mimo. Y siempre se encuentran cosas más que interesantes. Como el cartel es tan extenso, no merece la pena reproducir concierto a concierto. Lo mejor es ir a la web de Jazzaharrean y comprobarlo. Hay para todos los gustos. El swing de Ballroom Kings o los festivos Cromática Pistona, el blues más tradicional de Blues&Decker, los vientos de Funk it!, los poco convencionales Duas Semicorcheias Invertidas…
Pero me doy el lujo de destacar a un grupo que actuará este sábado 6 en la plaza del Matxete. Son los catalanes The Excitements, un grupo nacido en 2010 pero que se lo rifan en los festivales de media Europa. Practican un rhythm’n’blues inspirado en la vieja escuela y parecen sacados de la América más profunda. Tras su cantante Koko-Jean Davis hay un grupo formado por otros seis músicos solventes a quienes comparan con Ike&Tina Turner o Etta James. Hasta el mismísimo Eli ‘Paperboy’ Reed les adula. En el escenario se crecen con su música negra que contagia el ritmo a cualquiera.
Por cierto, les precederá en el escenario un grupo con un nombre de una expresión muy catalana, Déu n'hi do!, y unas maneras más suaves y clásicas, con un estilo que se acerca al jazz más tradicional, y apoyado en una cantante que domina los standards.
En fin, muy recomendable plan para el sábado a partir de las 20:30 horas.
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