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Bizkaia aprueba el plan urbanístico de Lezama que beneficia a la alcaldesa

La alcaldesa de Lezama, Alaitz Etxeandia./EDN

Igor Marín

La Diputación de Bizkaia ha aprobado definitivamente el plan urbanístico de Lezama que beneficia a  su alcaldesa, Alaitz Etxeandia (PNV), ya que permite recalificar un solar de su familia para construir viviendas en una zona que fue calificada de inundable.

La aprobación ha sido publicada pocos días antes de la celebración de las elecciones, ya que se publicó el pasado 14 de mayo en el Boletín Oficial de Bizkaia. Etxeandia no se presenta a la relección tras ocho años al frente del consistorio, en los que se ha empeñado en sacar adelante este plan urbanístico que le beneficia.

Con el cambio, se contempla la construcción de 52 pisos en el solar de los Etxeandia, una operación que tenía además beneficios concretos: 5,5 millones de euros para la familia Etxeandia reflejados en un acuerdo de compraventa firmado con dos constructoras. Este acuerdo fue firmado en 2007, ocho meses antes de la aprobación del anterior planteamiento urbanístico que recalificaba sus terrenos.

El plan urbanístico de Lezama fue anulado en 2009 por irregularidades en el informe de impacto ambiental. Aunque no entraba en el fondo del asunto, el Tribunal Superior vasco estableció que “se debe hacer expresa referencia” al cambio de calificación de zona inundable. Los terrenos de la familia de la alcaldesa, ubicados junto al río Asua a su paso por Lezama, estaban considerados inundables desde 1993. Al revisarse en 2002 el plan urbanístico municipal, el Ayuntamiento mantuvo esta calificación, lo que persistió en 2006 al aprobarse inicialmente las normas subsidiarias. Pero en 2007, pocos días antes de la aprobación por el Gobierno vasco, el consistorio introdujo el cambio para convertirlos en urbanizables y la Dirección de Aguas del Ejecutivo aprobó la modificación en solo cuatro días y basándose en un informe municipal “que sólo ha podido ser analizado con premura”, según admitió entonces la Dirección de Aguas.

La anulación del plan por los tribunales no fue tenida en cuenta por la alcaldesa que empezó a a aprobar proyectos para impulsar la urbanización del solar de los Etxeandia, el llamado plan Txupetxa, que fue además la única actuación urbanística que se puso en marcha. Los intentos fueron cortados de raíz por los tribunales que, en tres fallos diferentes, en 2012, declararon ilegal la promoción urbanística en el solar de la alcaldesa al estar anulado todo el plan general de Lezama.

Ante ello, el Ayuntamiento empezó a tramitar un nuevo plan urbanístico en el municipio, que era prácticamente idéntico al anterior. Su puesta en marcha ha supuesto fuertes enfrentamientos con la Diputación vizcaína, también dirigida por el PNV, y de hecho desde su aprobación provisional en septiembre de 2013, su tramitación ha estado prácticamente paralizada. Se han requerido casi otros dos años para llegar a la aprobación definitiva, una competencia exclusiva de la Diputación vizcaína.  Una orden foral aprobada el pasado 4 de mayor por el diputado vizcaíno de Presidencia y actual candidato del PNV a diputado general, Unai Rementeria, dio luz verde al proyecto con la obligación de acometer 62 correcciones.

En la orden, se incluye la obligación de que se descubra el río que pasa justo al lado del solar de los Etxeandia, unas obras  cuyos gastos  serán a cargo de “la actuación colindante o  bien a cargo del Ayuntamiento de Lezama”, dice textualmente.

La plataforma Lezama Bizirik, el grupo que llevó en 2007 el plan a los tribunales y consiguió su anulación en 2009, ha criticado que “encima estos gastos” sean para los vecinos y ha anunciado que estudiará denunciarlo de nuevo ante la Justicia. “Este PGOU es una copia de aquellas Normas, por lo que teniendo en cuenta los sucedido en estos años entendemos que nos asisten más razones que entonces para solicitar su anulación. Intentan de nuevo, lo que no han conseguido durante nueve años de continuos esfuerzos: poder edificar en la parcela propiedad de la familia de la alcaldesa saliente”. Esta plataforma señala además “la gravedad que supone que, en un municipio de importante componente rural, se califiquen casi 600.000m2 de tierras de alto valor agrario como industrial, cuando la actual zona industrial esta semivacía. Asimismo es inadmisible que se plantee, y menos en la crisis que aún soportamos, construir casi 500 nuevas viviendas cuando de las 1.000 existentes más de 200 no están ocupadas”.

La alcaldesa Alaitz Etxeandia ha participado en las votaciones, aprobando los sucesivos trámites (el PNV tiene seis concejales frente a cinco de Bildu, el único grupo de la oposición) para poner en marcha el plan que le beneficia. Bildu pidió en un pleno su recusación que fue desestimada gracias al voto de calidad del edil que hizo las funciones de la alcaldesa.

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