El Círculo de Empresarios reclama una bajada de impuestos... pero solo a las rentas más altas
El Círculo de Empresarios Vascos cree que “ha llegado el momento de rebajar la presión fiscal” para contribuir a afianzar la recuperación económica y la creación de empleo, además de fomentar la competitividad. Y para conseguirlo, considera que lo mejor es rebajar el tipo marginal del IRPF hasta el 40%, reducir el de sociedades hasta el entorno del 23% y suprimir el impuesto de patrimonio. Es decir, reducir impuestos a las rentas más altas, como es el caso de patrimonio y el de sociedades (que grava solo a las empresas que tienen beneficios). Esta asociación de carácter privado agrupa a la élite empresarial de Euskadi y estñá integrada por más de 70 presidentes, consejeros delegados y directores generales de las mayores empresas de la comunidad autónoma. Para el Círculo, el Concierto Económico debe ser aprovechado para fomentar el crecimiento económico y el empleo, y para ello proponen diferentes medidas, entre ellas la bajada en la presión fiscal.
El presidente del Círculo, José María Bergareche, y el expresidente, Alfonso Basagoiti, han presentado un documento que incluye una treintena de propuestas en materia de política fiscal y que ya ha hecho llegar a las tres diputaciones vascas. Sobre el IRPF el expresidente del Círculo, Alfonso Basagoiti, se centra en el marginal máximo y propone reducir la presión actual situada en el 49% hasta el 40%. Además, aboga por suprimir el Impuesto sobre el Patrimonio por tratarse de una carga “censal, de control, recaudatorio” que no tiene “ningún sentido y genera muchísima crispación”. En cuanto al Impuesto de Sociedades, la asociación empresarial sostiene que debería tender hacia la media europea del 23% frente al 28% actual.
“Ha llegado el momento”, según Basagoiti, “de que la política tributaria colabore en la reactivación de la demanda interna, consolidando un marco estable que armonice la arquitectura fiscal con un modelo racional de gasto, de dimensión en la administración y de estado de bienestar sostenible, pero también de fomento económico”.
El Círculo alerta de la importancia de “no espantar a los altos ejecutivos” con “una presión fiscal mayor que en territorios adyacentes” porque conlleva una pérdida de centros de decisión y suponen “una economía paralela” a través de la decisión de compras y adjudicaciones. En este sentido, Basagoiti ha recordado que la marcha de los gestores de SICAV supuso “empobrecer una plaza financiera” como Bilbao. “No se puede poner aquí a los altos ejecutivos y a los ejecutivos medios de una empresa una presión fiscal mayor que en los territorios adyacentes porque, lógicamente, van a estar en territorios adyacentes. Y aquí se hace y eso es una pérdida de centros de decisión”.
Sobre la subida de los salarios de los trabajadores, Basaoiti se ha limitado a vincularla con una marcha positiva de cada empresa.
