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El Gobierno vasco sufrió una 'crisis presupuestaria' por el aplazamiento de pago de 750 millones de las diputaciones

El consejero Ricargo Gatzagaetxebarria interviene en el Parlamento vasco.

Aitor Guenaga

Bilbao —

Poco a poco se va teniendo una foto más nitida de la evolución presupuestaria de los primeros meses de este año y de la capacidad de gasto real del Gabinete de Urkullu. El Gobierno 'peneuvista' ha reconocido que entre el 9 y el 11 de abril, las tres diputaciones solicitaron aplazamientos de pago por valor de 750 millones de euros. Precisamente en torno a esas fechas, los socialistas vascos denunciaron los “retrasos” que se estaban produciendo en la ejecución de los planes pactados en septiembre de 2013 en relación con la reactivación y la creacion de empleo, entre ellos los planes de los ayuntamientos vascos. La sospecha era de falta de liquidez en el Gobierno para cumplir sus compromisos de gasto.

El líder de los socialistas vascos, Patxi López, denunció de manera pública estos retardos en una rueda de prensa el 8 de abril y el 11 de ese mismo mes, ya en la tribuna del Parlamento, volvió a preguntar a Íñigo Urkullu por los “retrasos” de las políticas de empleo pactadas entre PNV y PSE en septiembre del año pasado.

Unas semanas antes, los socialistas dicen conocer la información de que se ha producido una supuesta “orden verbal” a todos los departamentos sobre una “retención de crédito” del 20% en los capítulos del presupuestos de cada consejería que afectan a “gastos corrientes, subvenciones e inversiones” (los capítulos 4 y 7 en la jerga presupuestaria). La denuncia la trasladó el portavoz del PSE-EE en el Parlamento vasco, José Antonio Pastor, quien en una rueda de prensa el 16 de abril da cuenta de esa orden verbal que, de hecho, supone “no gastar lo estipulado en los presupuestos” y pregunta directamente al Ejecutivo por esa situación.

Pastor midió en esa comparecencia sus palabras y en ningún momento habló de que el Ejecutivo estaba en quiebra inminente. “Nosotros no diremos que Euskadi está en quiebra. Las palabras gruesas, tan irresponsables como falsas, las dejamos para el estilo de oposición de otros”, añadió entonces el dirigente socialista. Se refería a la polémica suscitada por el entonces líder del PNV y hoy lehendakari, Íñigo Urkullu, cuando en febrero de 2012 aseguró que tenía “constancia” de que la situación económica del Gobierno vasco revestía una “extrema gravedad” por el “déficit desbocado” y la “falta de recursos” existentes, y, a preguntas de un periodista, afirmó que veía riesgo de “quiebra inminente” en el Gabinete de Patxi López.

Pero Pastor sí preguntó cómo afectaba esa “orden verbal” a cada “sección, programa, partida, empresa y sociedades públicas para ”conocer qué está pasando, cuál es la realidad presupuestaria“, al tiempo que criticaba que el Gobierno no hubiera informado de esa situación y de los retrasos en la ejecución de determinados planes al socio con el que firmó un acuerdo en septiembre pasado para la reactivación económica. También entonces, el portavoz socialista inquirió por si existía algún problema con las aportaciones de las diputaciones al presupuesto gubernamental.

“Desequilibrio presupuestario”

En sendas respuestas parlamentarias, a las que ha tenido acceso eldiarionorte.es, el consejero de Hacienda y Finanzas del Gobierno vasco, Ricardo Gatzagaetxebarria, admite que en esas fechas hubo una solicitud de aplazamientos de pago por parte de las tres diputaciones de 750 millones de euros. En concreto, Gipuzkoa solicitó el aplazamiento de pago de 450 millones el 9 de abril. Ese mismo día, la diputación de Álava hizo lo propio por un importe de 150 millones de euros y, dos días más tarde, Bizkaia solicita el aplazamiento de pago de otros 150 millones de euros. “Es evidente que han ocultado esa realidad de los aplazamientos hasta ahora”, explican fuentes socialistas. Con todo, la solicitud de aplazamientos por parte de las diputaciones no es algo “excepcional”, según fuentes consultadas, aunque no pueden precisar si las cantidades han sido tan elevadas en otras ocasiones.

Sobre las retenciones de crédito, Hacienda reconoce en la otra respuesta a la pregunta formulada por el dirigente socialista alavés Txarli Prieto, que “las inmovilizaciones de créditos que en ejecución presupuestaria se han hecho, ninguna vigente al día de la fecha, han respondido a reservas de créditos para financiar modificaciones presupuestarias, para financiar créditos ampliables por naturaleza y para poder hacer frente a la necesidad de ampliar y complementar el crédito presupuestario inicial en la cantidad necesaria de las obligaciones a las que previsiblemente va a tener que hacerse frente por la evolución del gasto proyectado”. Las retenciones de crédito supone un bloqueo de las partidas afectadas, lo que impide su gasto por parte de los departamentos afectados.

El consejero Gatzagaetxebarria no habla de órdenes verbales o escritas sobre retenciones de crédito, pero lo que sí reconoce haber hecho es “concienciar e informar” al resto de departamentos para que “actúen con prudencia y cautela” en el gasto y “coherencia” con la evolución del ingreso presupuestario. “Lo contrario sería un actitud poco prudente y conducente a un posible desequilibrio presupuestario no querido por nadie”. Finalmente, Gatzagaetxebarria contesta a los socialistas que “sin dejar de activar y ejecutar lo programas departamentales que han de realizarse” -en alusión también a lo pactado con el PSE- el Ejecutivo velará por el “equilibrio financiero” con el objetivo de “no gastar más de lo que se tiene y llevando a cabo una gestión responsable de los recursos públicos”.

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