El Gobierno vasco, que corre con el 84% de la financiación, no ha sido consultado sobre el nombre
El Gobierno vasco corre con el 84% de la financiación de la nueva estación de autobuses de Vitoria, pero no ha sido consultado por el alcalde de la ciudad, Javier Maroto, a la hora de bautizarla. Maroto ya ha decidido de forma unilateral que se denomine Adolfo Suárez, en reconocimiento al expresidente recientemente fallecido. Sin embargo, ningún partido de la oposición apoya esta decisión. Incluso vitorianos a título personal han comenzado a gestar en Internet una candidatura paralela para poner nombre a la estación. Su objetivo es que se denomine '3 de Marzo', en recuerdo de los sucesos de 1976, en los que fueron asesinados cinco obreros a manos de la Policía cuando celebraban una asamblea.
La nueva infraestructura costará 16,5 millones de euros, de los que, el Gobierno vasco financia el 84%, tal y como se ha encargado de recordar. Un portavoz del Departamento de Medio Ambiente y Política Territorial (del que depende el área de Transportes) ha lamentado la postura del alcalde y le ha solicitado que trate de concertar el nombre con el resto de partidos. “Nadie nos ha preguntado nada al respecto. Lo normal hubiera sido recibir una llamada, pero en cualquier caso lo importante es que el nombre de la estación cuente con el mayor apoyo posible”.
La polémica por la actitud de Maroto ha ido en aumento, hasta el punto de que el propio alcalde ha dado un paso atrás y ha mostrado su voluntad de consensuar. Sin embargo, también ha dejado claro que su intención sigue siendo que la estación reciba el nombre del expresidente. “Se trata de una propuesta y voy a estudiar los motivos del rechazo”.
