El PNV previene al resto de partidos sobre la tentación de ir a una guerra de bandos

Andoni Ortuzar, presidente del PNV, aprovechó su intervención en un acto electoral en Azpeitia (Gipuzkoa), para recordar el episodio de las guerras de bandos o guerras banderizas que se dieron en la zona a finales de la Edad Media. Estos enfrentamientos tuvieron como protagonistas a los diferentes linajes de la nobleza rural vasca y cesaron solo con la imposición de la autoridad real, en este caso del rey Enrique IV. “Fueron décadas de pelea y de muerte. Al final vibo el rey y mandó parar. A algunos los desterraron a Andalucía”. De esta forma, Ortuzar quiso comparar la desgracia que trajeron aquellas peleas para Azpeitia y para Euskadi con las que pueden llegar si los partidos, sindicatos y agedntes sociales no hacen piña para reconstruir la Euskadi post pandemia.

El líder jeltzale ve a su partido como la “diana” de todos los demás porque se mueven más a gusto en el lío que en el acuerdo. Pero frente a la tentación de ir a la pelea, insistió en que el PNV está en otra dimensión. “Ahora toca reconstruir la Euskadi del futuro”. Ortuzar sabe lo que quiere la sociedad en estos momentos y es unidad.

Por eso, hizo un llamamiento al resto de fuerzas políticas y sindicales para trabajar de manera conjunta para salir adelante y les tendió la mano del PNV. De manera especial, a las fuerzas que se reclaman abertzales. “Tenemos que aprender de la historia”, espetó sin nombrar expresamente a EH Bildu.

Joseba Egibar, quien acompañó a Ortuzar en el acto y es candidato por Gipuzkoa, fue incluso más crítico con la actitud mostrada por oposición y sindicatos hacia el Gobierno vasco durante la gestión de la pandemia. “Lo cierto es que la COVID-19 nos ha puesto a cada uno en nuestro sitio”.

Según Egibar, ni la oposición ni los sindicatos han estado a la altura de lo que el momento requería. Incluso les acusó de utilizar el virus como elemento de destrucción electoral contra el PNV. “Se olvidaron del bien común, que debe ser el objetivo de la política”.

Mientras, el candidato a la reelección como Lehendakari, Iñigo Urkullu, dedicó su intervención en un acto diferente a plantear medidas para favorecer la conciliación de la vida personal y laboral con permisos de paternidad y maternidad “iguales e intransferibles” en el sector público y privado. También garantizó que si vuelve a repetir todos los niños hasta tres años de edad recibirán servicios de atención en escuelas infantiles y Haurreskolak. Según Urkullu, las familias constituyen un “refugio” de valores como la igualdad, la educación, el respeto y la solidaridad intergeneracional.

Junto a los permisos iguales, también adelanto la creación de una dirección de Familias e infancia y más ayudas económicas a la natalidad.