Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

“¿Aún sirvo para trabajar?”

Oficina de Lanbide.

Eduardo Azumendi

“Llevo más de un año en paro. Tengo muchos momentos de desesperación porque no veo la salida. Lo peor es por las noches, cuando no consigo conciliar el sueño y me asaltad la duda de si volveré alguna vez a trabajar, si aún sirvo para trabajar”. Luis M.. tiene 48 años de edad. Hoy tiene cita en la oficina de Lanbide. Se va apuntar a un curso de formación que no tiene nada que ver con el ytrabajo que ha desarrollado antes de quedarse en paro. Luis M. fue director comercial para la zona norte de España de la delegación de una multinacional. En los mejores momentos, llegó a dirigir a más de 50 personas. “Ahora me conformo con poder seguir en activo. Con el paso de los meses te das cuenta de que ya no volverás a trabajar en tu área. Entonces es cuando solo aspiras a encontrar un trabajo mínimamente digno. ¿'Mileurista'? ¿Dónde hay que firmar?”.

El paro de larga duración es una de las peores lacras de la crisis y la sombra que amenaza cualquier intento de reactivación de la economía. Euskadi tiene en la actualidad 126.600 personas desempleadas, según la Encuesta de Población Activa (EPA). En los últimos 12 meses, el paro ha descendido en la comunidad autónoma pasando del 16,4% al 12,8%. El País Vasco es en estos momentos la comunidad con la menor tasa de desempleo de todas las regiones españolas. Incluso, la incidencia del desempleo de larga duración disminuye notablemente en los últimos doce meses, pasando del 67% al 63%, según los datos analizados en el Informe Laboral Euskadi, elaborado por el grupo de investigación que dirige la catedrática Sara de la Rica, de la Universidad del País Vasco.

“Aunque la incidencia del desempleo de larga duración disminuye, el hecho de que 63 de cada 100 desempleados lleve más de un año en esa situación es alarmante y un drama para todas las personas y hogares que lo sufren”, señala Sara de la Rica en su informe. A lo que hay que añadir que la mayor parte de ellos tiene responsabilidades familiares o directamente es cabeza de familia.

Iñigo Calvo Sotomayor, economista y profesor de Deusto Business School-Universidad de Deusto, advierte de que este nivel de desempleo debería hacer reflexionar al conjunto de la sociedad. “Gran parte de las personas paradas en la economía vasca llevan más de dos años buscando empleo, lo que puede generar histéresis laboral, esto es, la posibilidad de que su situación se haga crónica y no puedan volver a incorporarse al mercado laboral aunque mejore la situación económica”.

Es decir, un drama. Eso es precisamente lo que refleja el ánimo de Lucía A., de 51 años, quien también espera su turno en la oficina de Lanbide. Con más de 25 años como administrativa en una empresa de distribución, el ERE que sufrió su empresa hace dos años se fue llevando paulatinamente a toda la plantilla. “Yo fuí de las primeras en caer. Me considero una persona polivalente, pero no he logrado convencer a ninguna empresa para que me contrate de nuevo. He mandado currículum y he tenido entrevistas de trabajo, pero a mi edad solo sirven los contactos. Bueno, como en casi todo”. Tan polivalente se considera Lucía que ha tratado de mantenerse activa paseando y cuidando perros, cuidando ancianos por las noches en los hospitales, y hasta ha decidido convertirse en adiestradora profesional de perros. “Siempre he tenido perro y creo que la única opción a estas alturas de mi vida pasa por montar mi propio negocio”.

“Nunca pensé que me podía tocar”

¿Y con qué ahorros cuenta? “Los dos años en paro han pasado factura a los ahorros. Afortunadamente mi marido mantiene su empleo, pero tengo dos hijos que aún requieren de mucha ayuda para salir adelante. Nunca pensé que me podía tocar. Ves en la televisión las colas del paro en los servicios de empleo, pero parece que queda lejos. Hasta que lo tienes encima”. La visita periódica por las oficinas de empleo es obligada, pero la confianza en encontrar algo en Lanbide es casi nula. “Hace poco escuche a uno del Gobierno vacso que ni su hijos se acercaban a Lanbide en busca de empleo. Los profesionales te atienden bien, pero ese señor tenía mucha razón”.

La catedrática Sara de lam Rica considera “imprescindible” que las instituciones sigan tratando de activar a los desempleados de larga duración para que sus problemas de empleabilidad disminuyan y a medida que la actividad económica aumenta, puedan estar preparados para ser absorbidos por el mercado laboral. Un horizonte que tanto Lucía como Luis ven cada día más lejano.

Etiquetas
stats