“Una parte de la sociedad sigue viendo a los que piensan diferente como enemigos”
Cinco años después del anuncio de cese de la violencia por parte de ETA, en algunos ámbitos las espadas siguen en alto. El historiador y representamte del Instituto Universitario de Historia Social Valentín de Foronda, Antonio Rivera, previene contra la tentación “entendible” de querer pasar rápidamente la página del terrorismo de ETA porque “lo que no se resuelve en el pasado corre el riesgo de reaparecer en el futuro”. Es decir, que el “conflicto” que una parte de la sociedad vasca lo vio como algo lógico y justificó durante más de cuatro décadas los asesinatos de ETA, perfectamente puede reaparecer dentro de unos años.
“¿Quién garantiza que no vuelve a regresar ese conflicto si no resolvemos el pasado? En estos momentos, una parte de la sociedad vasca sigue pensando en términos de conflicto y no ve a sus rivales políticos como unos adversarios, sino que los ve como enemigos”. Rivera ha participado en la presentación de la publicación 'La paz era esto. Sociedades después del truma colectivo', un libro que recoge las ponencias del XIII Seminario Fernando Buesa, celebrado en octubre del año pasado. Junto a Rivera han participado en la presentación del libro Marta Buesa y Jesús Loza (ambos en representación de la Fundación Fernando Buesa.
Además del peligro de que la renuncia de ETA no sea irreversible, Rivera advirtió de que los grandes perjudicados de olvidar rápidamente son las víctimas del terrorismo, la memoria y la sociedad futura, que tarde o temprano preguntará “por qué no se le contó todo. Y los muertos sin sepultura volverán, lo mismo que ha vuelto el fantasma de la Guerra Civil”.
Según Rivera, no hay mucho que celebrar cinco años después de la renuncia de ETA salvo que “ya no hay que mirar debajo del coche por si han puesto una bomba” porque ETA ya estaba “amortizada antes de anunciar su cese. La derrota era evidente. Ahora lo importante es que los referentes históricos que queden se basen en una memoria sólida y verdadera. Hay que conocer lo ocurrido y que lo sepan las futuras generaciones para que no vuelva a pasar, pero no sobre convenciones falsas”.
