Quedan en libertad provisional los tres detenidos por el derrumbe de Zaldibar

Los tres detenidos por el derrumbe de Zaldibar que supuso un desastre ambiental y sepultó a Alberto y Joaquín, los dos trabajadores que aún continúan en paradero desconocido, quedan en libertad provisional con obligación de comparecer una vez al mes ante un juez, según fuentes judiciales. José Ignacio Barinaga, propietario de la empresa gestora del vertedero de Zaldibar, su sobrina, Arrate Bilbao, administrativa, y el responsable técnico de las instalaciones, el ingeniero Juan Echevarria, que fueron detenidos el pasado martes han pasado este jueves a disposición judicial en el juzgado de Durago (Bizkaia), que dirige la investigación. Los tres detenidos se han negado a declarar ante la jueza sobre los hechos ocurridos el pasado 6 de febrero, debido a que sus abogados han recibido el atestado “escasamente una hora antes” de comparecer, y “no han tenido tiempo material de examinar” las acusaciones, según han informado fuentes de la empresa a Europa Press.

Tras su paso por el juzgado han quedado en libertad provisional, pero tendrán la obligación de comparecer una vez al mes en el Juzgado y se les ha retirado el pasaporte. Los arrestados están siendo investigados por un supuesto delito contra la vida y la salud de los trabajadores y otro ambiental. Han sido trasladados este jueves a las 10 de la mañana a los Juzgados de Durango desde las dependencias de la Policía vasca en Eibar, donde han permanecido menos de 48 horas para realizar las oportunas diligencias. Los nuevos elementos aparecidos en la investigación fueron los que llevaron a la Ertzaintza a practicar los arrestos después de que la Policía emitiera un informe en el que apreciaba indicios de criminalidad en la gestión de Verter Recycling, es decir, que había posibilidades de que las actuaciones negligentes de los propietarios pudieran conducir al deslizamiento del vaso del vertedero, con las consiguientes consecuencias ambientales y personales.