El jurado declara culpables de asesinato con alevosía al padre e hijo acusados del crimen de Zabala

El jurado popular ha declarado culpables de asesinato con alevosía a J.D., acusado de matar a tiros el 24 de octubre de 2019 a David G. en la calle Bruno Mauricio Zabala de Bilbao, y también a su padre, L.D. Asimismo, ha considerado culpables a ambos de un delito de asesinato en grado de tentativa cometido contra el hermano de la víctima, D.G. En cuanto a las otras tres personas acusadas de complicidad, dos hombres y una mujer, familia de los dos encausados principales, ha declarado culpable de un delito de amenazas a uno de ellos y a los otros dos les absuelve, según recoge Europa Press.

Los hechos, juzgados en la Audiencia Provincial de Bizkaia durante las dos últimas semanas, se remontan al 24 de octubre de 2019, cuando el menor de los dos principales acusados, J.D., mantuvo a primera hora de la mañana un enfrentamiento en un salón de juegos con el hermano de la víctima, al que agredió con un objeto punzante en el brazo. El origen de la disputa se encontraría en la relación sentimental que el herido mantenía con la exmujer del procesado.

El varón herido acudió, horas después, a la vivienda de los dos principales acusados, acompañado de la víctima y de su mujer. Allí, se produjo un altercado en el portal y J.D. y su padre bajaron de su vivienda armados con escopetas de postas. Ambos realizaron disparos, pero fue el hijo, J.D., quien efectuó el disparo que impactó en la cabeza de la víctima, que habría salido corriendo del lugar al verle. La víctima sufrió hemorragia cerebral y falleció en el lugar. El veredicto del jurado popular que ha juzgado este caso en la Audiencia Provincial de Bizkaia se ha dado a conocer tras dos días de deliberación.

Los miembros del jurado, formado por cuatro hombres y cinco mujeres, han declarado a J.D., que en el momento de los hechos tenía 38 años, y a su padre, J.D., de 70 años cuando ocurrió el crimen, culpables de un delito de asesinato consumado con alevosía por la muerte de la vida de David G., con las atenuantes de “ideas sobrevaloradas por sus creencias”, que influirían “levemente” en la actuación volitiva, y de entrega voluntaria, y de un delito de asesinato con alevosía en grado de tentativa contra el hermano de la víctima.

De esta forma, el jurado ha considerado que “ambos intervienen” en los hechos que acabaron con la muerte de David G. y “asumen los resultados del otro”, siendo los dos autores de un asesinato cometido y de otro en grado de tentativa. Por su parte, en relación a los otros tres encausados por complicidad, un varón, su mujer y el hijo de ambos, familia del autor del disparo mortal y de su padre, el jurado ha encontrado culpable de un delito de amenazas al padre por golpear con una cachava el coche del hermano de la víctima con él dentro, y ha absuelto a la mujer y al hijo.