La participación de la mujer en los órganos de decisión de las cooperativas extremeñas agroalimentarias es testimonial, con apenas el 1% de representación. Motivo por el que la Junta de Extremadura ha puesto en marcha un proyecto para aumentar el número de mujeres en los puestos de responsabilidad en los consejos rectores de las cooperativas agroalimentarias.
Se trata de un trabajo apoyado por el Instituto de Estadística de Extremadura y que nace porque se necesita insistir y que se entienda que “la misión de la mujer y su participación en la toma de decisiones es fundamental en las cooperativas del siglo XXI”. Y por tanto debe ocupar el lugar que le corresponde.
“Tendremos 2 ó 3 presidentas en nuestra comunidad autónoma en 250 cooperativas agroalimentarias y tiene que haber muchas más mujeres que se encuentren formadas para entrar en estos órganos y aportar su punto de vista”.
Así lo han puesto de manifiesto en la presentación del proyecto “La igualdad de género en las cooperativas agroalimentarias, el acceso de las mujeres a los puestos de responsabilidad”, los directores generales de Economía Social, Carmen Moreno; Desarrollo Rural, Manuel Mejías, y del Instituto de la Mujer (IMEX), Elisa Barrientos.
Carmen Moreno ha afirmado que hay mujeres que hacen labores de agricultoras y ganaderas y, sin embargo, “tienen miedo a poder ser figuras representativas que tomen las riendas de las empresas”.
A su juicio la paridad por la que ha apostado el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, hay que extrapolarla al sector privado, sobre todo al sector agroalimentario donde es “especialmente difícil”.
El proyecto
Se desarrolla en tres fases: un observatorio en la que el Instituto de Estadística realiza encuestas para concretar el diagnostico, jornadas formativas y seminarios cooperativos.
Tras las encuestas a mujeres, para que las Oficinas de Igualdad extremeñas detecten las diferentes casos en las cooperativas de sus territorios, se desarrollarán 35 jornadas de formación, dirigidas a las mujeres en diferentes municipios, en las que se tratará el marco jurídico del cooperativismo, el régimen económico y la igualdad de genero.
La última fase está compuesta de cinco seminarios cooperativos para formar a futuras mujeres directivas que estarán en los consejos de dirección, que se realizarán en el Valle del Jerte, La Serena, Tierra de Barros, Sierra de San Pedro y Vegas Altas, donde se abordarán el papel de socio en la cooperativa, empoderamiento y liderazgo y habilidades sociales, entre otros temas.
Por su parte la directora del Instituto de la Mujer ha resaltado la transversalidad del principio de igualdad que se da en la Junta de Extremadura, que no es un asunto solo del IMEX y ha abogado por “romper barreras y techos de cristal” para que las mujeres lleguen donde deben llegar.
“La Organización Internacional del Trabajo (OIT) pone en valor la presencia de mujeres en las cooperativas y lo ponen como motor de cambio para la economía social, por la que también apuesta la Junta”.
Ha asegurado que el elemento de valor que aportan las mujeres está más que demostrado a nivel empresarial, ya que las empresas que cuentan con ellas son más rentables y son más estables económicamente.
Para el director general de Desarrollo Rural, el proyecto es una apuesta por la formación, la participación y el empleo de las mujeres rurales, por lo que el objetivo es promover actuaciones que contribuyan a la igualdad de oportunidades.
Pare ello han llevado a cabo ya la creación del Registro de Titularidad Compartida, la priorización en las ayudas de las explotaciones de titularidad compartida y la igualdad de género en los grupos de acción local. Mejías ha explicado que las actuaciones presentadas han sido financiadas a través del Fondo Social Europeo por un importe de 13.500 euros.