Corresponsabilidad: una tarea de empresas, administraciones y familias contra la brecha de género

A la hora de hablar de conciliación las miradas se centran en el hogar y el reparto de las tareas. Pero la igualdad requiere un proceso más amplio, en el que deben implicarse todos los actores protagonistas.

Los sindicatos defienden una corresponsabilidad desde las relaciones empresariales, políticas y también familiares. Lourdes Núñez, secretaria de la Mujer de CCOO en Extremadura, anima a analizar qué están haciendo las empresas que contratan para cambiar las cosas y qué políticas aplican las administraciones. Qué infraestructuras ponen a disposición de la ciudadanía para conciliar y qué se hace también desde las edades tempranas, en las escuelas, para transformar desde la educación.

El Instituto de la Mujer, acompañado de los sindicatos CCOO y UGT, celebró días atrás unas jornadas sobre conciliación y corresponsabilidad. Allí las organizaciones sindicales reclamaron planes de igualdad en las empresas de menos de 100 empleados, mirando así al tejido empresarial extremeño.

También medidas en el sector de la dependencia y en las guarderías de 0 a 3 años, que a su juicio deberían de ser gratuitas. A lo que suman que se dote presupuestariamente la Ley de Dependencia para que “esas estructuras necesarias puedan posibilitar que hombres y mujeres podamos corresponsabilizarnos”.

Comisiones Obreras destaca que las empresas tienen un papel fundamental, y los comités de empresa deben favorecer la inclusión cuando se sientan en las mesas de negociación. “Deben aportar deben apostar por la conciliación y por la gestión de los tiempos”.

Al mismo tiempo instan a las administraciones a desarrollar políticas transversales enfocadas hacia la igualdad de género. Mirando a realidades como la violencia de género y el acoso en el mundo de las empresas.

Relaciones desiguales

Ponen de manifiesto que existe una imagen “cuadrada” por la que una mujer tiene unas tareas reproductivas, y el hombre productivas. Algo que queda en evidencia cuando la edad biológica reproductiva de la mujer se convierte en un 'hándicap' para encontrar un empleo o para mantenerlo, según explica la representante sindical.

La experiencia muestra que las reducciones de jornada y las bajas por maternidad recaen en ellas. Hay un porcentaje muy reducido de mujeres que cedan parte de la baja de maternidad a los hombres para que ellos también adquieran esa responsabilidad. 

Recuerda que las bajas son nominales, no están ligadas al género. Sin embargo son ellas las que se salen del circuito de competencia empresarial.