Felipe González defiende en Cáceres una reforma electoral para que el Gobierno no dependa de partidos “periféricos”
El expresidente del Gobierno Felipe González ha abogado en Cáceres por ‘perfeccionar’ la Ley Electoral cambiando el modelo de representación de los “partidos periféricos” para que el Ejecutivo central no dependa de ellos en decisiones tan importantes como, por ejemplo, la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
Ha apuntado que el resto de partidos centrales tienen en su mano ‘liberar’ al Gobierno de “depender de los que quieren romper España” con una abstención a las cuentas.
González ha apostado por reformar la Constitución de 1978 para adaptarla a la realidad actual, ya que hace 40 años se tuvo en cuenta una estructura territorial en la que se recogía una previsión de descentralización de poder que “algunos creen que ya ha culminado”. Por lo que habrá que “revisar” el texto para que el sistema funcione “a modo federal”, y no se confunda la “descentralización política” con la “centrifugación del poder”.
“Yo soy partidario de afrontar unas cuantas reformas de la Constitución... y los niveles de consenso deberían ser mayores que hace cuarenta años porque lo haría gente que solo ha vivido en democracia, por lo que el acuerdo debería estar basado en el respeto al otro”, ha señalado.
La reforma constitucional
González, que ha ofrecido este miércoles en Cáceres la conferencia 'La Constitución, construir convivencia', con la que se han abierto Los Desayunos de El Periódico Extremadura, se ha mostrado partidario de reformar la Carta Magna a pesar de que es “la más garantista” de las del entorno europeo si se compara con la de otros países como, por ejemplo, Bélgica, que “es el modelo para los 'pseudoexiliados'”, ha ironizado.
“No tengo miedo a entrar a debatir con los liquidacionistas para que comparen desde el primer artículo hasta el último con quien quieran”, ha subrayado González, que apunta que el texto constitucional español es “tan garantista” que incluye también la posibilidad de un indulto para los políticos del 'procés'.
“Constitucionalmente estos señores tienen todos los derechos, absolutamente todos, incluso la presunción de inocencia y si queremos tener una cierta superioridad ética en esta batalla tenemos que ser muy rigurosos en el respeto a las garantías constitucionales”, ha espetado en su intervención. “No podemos, por mucho que nos irrite, vulnerar los derechos constitucionales de nadie”, ha añadido.
En este sentido, ha defendido la “fortaleza” de la Constitución porque, a pesar de todo el proceso independentista de Cataluña, España “sigue siendo una soberanía con un territorio en el que la integridad no está amenazada”.
Monarquía parlamentaria
Respecto a la irrupción de la extrema derecha en el panorama político, González ha recordado que él compartió escaño en el Congreso de los Diputados con Blas Piñar y “no pasó nada”, porque eso forma parte del juego democrático.
Al ser preguntado sobre si prefiere como modelo de Estado una monarquía o una república, González ha defendido la monarquía parlamentaria actual que acepta el juego democrático y la alternancia de poder. “Prefiero un jefe de Estado que garantice el voto popular, y esa garantía es mayor con uno que reina pero no gobierna, que uno que influya aunque no tenga poderes ejecutivos”, ha manifestado en alusión a Nicolás Maduro y el modelo de Venezuela.
Nucleares
Por otro lado el expresidente del Gobierno ha dicho que la decisión de acabar con las centrales nucleares supone “asumir el coste y las consecuencias”, especialmente si antes no existe una alternativa competitiva a las mismas.
Ha dicho que tener la voluntad de acabar con el ciclo nuclear, el cual llegará, “puede ser bueno, malo o regular”, dependiendo de la alternativa. “Tener la voluntad no es lo mismo que acabar con el ciclo sin tener ya resulta una alternativa competitiva”, pues afecta a mucha gente, a la economía y el empleo“, y debe ser razonable de ”introducción en el tiempo y no generando más dependencias“.
González, que ha estado acompañado en este acto por el jefe del Ejecutivo extremeño, Guillermo Fernández Vara, y el director del diario, Antonio Cid de Rivera, ha recordado que Alemania, optó por poner fin a la energía nuclear en 2020. A cambio, “tienen que tener a pleno pulmón la recuperación del carbón” y renovar un acuerdo con Rusia para un nuevo canal gasístico, el cual le genera dependencia.
Preguntado por las conexiones ferroviarias de alta velocidad entre España y Portugal, González ha manifestado que para “España es prioritario y para Portugal, lo deciden los portugueses”.
En este sentido, ha recordado que la autovía Madrid-Lisboa llegó a la frontera española -hasta la provincia de Badajoz- en 1992, “y en el año 2000 llegó la suya” hasta la frontera. Según González, el Ejecutivo portugués gobierna “con unos apoyos que no quieren entrar en eso ahora”.
“Interferencias en la justicia”
Por otro lado ha asegurado en Cáceres que existen “interferencias inaceptables” de carácter político en el ámbito judicial, como lo refleja a su juicio el mensaje de 'wasap' del portavoz del PP en el Senado, Ignacio Cosidó, el cual “descalifica” su posición. Piensa que este hecho “pone en crisis a las instituciones”, pues alrededor de este tipo de situaciones surge un debate parlamentario “de vuelo bajo”.
Un debate “marcado más por las descalificaciones que por el análisis político”, ha agregado el expresidente del Gobierno, que ha estado acompañado en este acto por el jefe del Ejecutivo extremeño, Guillermo Fernández Vara, y el director del diario, Antonio Cid de Rivera.
Ha defendido que la Constitución española, tema que ha centrado su intervención, tiene más vocación garantista de la independencia judicial que si el ministro/a de Justicia, como ocurre en Francia, tuviera los poderes que en España tiene el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Sobre el modelo de elección de quienes integran esta última institución, se ha preguntado cuál es la razón para creer que la autoelección por parte de los jueces y fiscales “garantiza la representación y la independencia”.
