Podemos y Ciudadanos se desentienden del rechazo del PP a los presupuestos de la Junta, y optan por negociar
El Partido Popular no ha conseguido ningún apoyo a la enmienda de totalidad presentada contra los presupuestos 2019 de la Junta y defendida por su líder José Monago en la Asamblea de Extremadura, ya que Podemos y Ciudadanos la han votado este martes en contra y prefieren negociar ahora en detalle el contenido, uniéndose así al no del grupo parlamentario socialista en el debate sobre el proyecto de Ley de cuentas de la Comunidad Autónoma para el año que viene.
La enmienda, que habría supuesto la devolución de las cuentas a la Junta, ha caído por 27 votos a favor (PP) y 37 en contra (PSOE, Podemos y Ciudadanos), mientras que el diputado derechista independiente Juan Morales (exPP), que había anunciado su abstención, se ha ido del hemiciclo antes de la votación tras pedir como su actual partido, Vox, la desaparición de los parlamentos autonómicos y de las comunidades.
Las cuentas de la Junta para el año que viene ascienden a 5.797,9 millones de euros y suponen un aumento del 6,7%, 364 millones, sobre el presupuesto de este año, gracias según la consejera de Hacienda y Administración Pública, y vicepresidenta de la Junta, Pilar Blanco-Morales, al aumento de la financiación nacional que le corresponde a la Comunidad, y más fondos europeos.
La Junta y el PSOE no tienen aún votos suficientes para sacarlas adelante en el Parlamento regional ya que cuentan con 30 escaños frente a 35 de la oposición, pero juegan con la división y diferentes intereses de ésta ya que por ejemplo Podemos (seis diputados) no quiere aparecer de ninguna manera en operación alguna junto al PP.
También Ciudadanos evita, porque compite, asociación alguna con los populares y por eso ha votado en contra la enmienda de totalidad defendida por Monago.
Modificaciones parciales
Una vez rechazada esta enmienda de totalidad, llega la fase del debate en detalle mediante enmiendas parciales al presupuesto que puede presentar cualquiera de los grupos incluido el gobernante, PSOE; tanto Podemos como Cs van a negociar introducir modificaciones, algo a lo que les ha invitado la consejera de Hacienda y especialmente al líder morado Álvaro Jaén.
Pilar Blanco-Morales ha defendido este proyecto, que son las últimas cuentas del Gobierno Vara antes de las elecciones de mayo próximo, como un intento más de conjugar crecimiento económico con cohesión social y reparto de riqueza, un proyecto enfocado a los más desfavorecidos, las clases medias, empresarios y autónomos.
Solidaridad entre generaciones, crecimiento sostenible para una mayor igualdad, y distribución de los beneficios del crecimiento económico, son otros principios políticos del presupuesto 2019, que dedica el 84% de su volumen, 3.100 millones de euros, a los servicios esenciales como son sanidad, educación y dependencia.
Unas cuentas “falsas”
La argumentación principal del PP en su enmienda de totalidad, expresada por su presidente regional y del grupo parlamentario José Monago, es que son unas cuentas “falsas” que inflan los ingresos. “Un presupuesto falso, fake, cero rigor y credibilidad, de ficción”, para “terminar de hundir Extremadura”.
Un “doping” presupuestario ya que los mayores ingresos por financiación autonómica y fondos europeos “se los ha inventado”.
Monago, que pactó con el presidente Fernández Vara los dos primeros presupuestos de esta legislatura, los de 2016 y 2017, le ha echado en cara no haber cumplido dos compromisos alcanzados en esas negociaciones, como eran suprimir el canon del agua y el céntimo sanitario.
El debate entre el líder del PP y la vicepresidenta y consejera de Hacienda se ha movido también en la deuda pública regional mediante reproches mutuos.
El diputado independiente y ex PP Juan Morales, ahora afiliado a Vox, ha dedicado su intervención a decir que el Estado autonómico es insostenible, hay que suprimir autonomías y lógicamente sus parlamentos autonómicos: “La teta de la vaca ya no da para tanta gente”, y añadía que se abstendría en la enmienda del PP “aunque tiene cosas buenas”.
Al terminar recogió sus papeles de escaño, se marchó y no volvió al hemiciclo ni para votar.
El líder de Podemos, Álvaro Jaén, dijo luego que le espantaba tenerle sentado como diputado, o que Vox vaya a conseguir concejales en las elecciones municipales del año que viene.
No a cualquier precio
Podemos, aprisionado políticamente en quedarse permanentemente fuera de los acuerdos y política concretas y se le dibuje en pinza opositora con el PP, o en servir de apoyo responsable al PSOE sin nada a cambio, ha echado en cara mediante Jaén a Fernández Vara creerse que “cualquier cosa que ustedes presenten la vamos a permitir”, pero se niegan al “esto es lo que hay” y miran al pacto nacional Sánchez-Iglesias para un “estamos condenados a entendernos”, también en Extremadura, “pero dejen de acaparar”.
Jaén espera que el Plan de Empleo propuesto en la negociación previa a las cuentas, y no incluido en ellas, entre ahora mediante la aprobación de enmiendas parciales.
Victoria Domínguez (Ciudadanos) le ha dicho a Monago, respecto a la enmienda de totalidad, que Extremadura necesita tener presupuestos, y a Vara que confía en las enmiendas parciales con “lealtad institucional” aunque nunca votaron, ni lo harán, a los presupuestos del PSOE.
Casado mira a Trujillo
Valentín García, portavoz del PSOE, ha reprochado por su parte a la “derecha hispánica”, en alusión al PP, que “tiene un gen no para pensar, sino para topar”, e intentado debilitar la posición de Monago, quien según él está haciendo méritos para buscar el dedo de Pablo Casado designándole líder regional, “pero Casado en vez de a Monago mira a Trujillo [en referencia a la relación estrecha entre el presidente nacional del PP y el alcalde popular de esa localidad, Alberto Casero] ”.