250 migrantes han pasado por el centro de acogida de Mérida, 16 de ellos menores
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El Centro Temporal de Acogida, Emergencia y Derivación de personas migrantes habilitado en el Alberge Municipal Juvenil 'El Prado' de Mérida ha atendido en sus dos primeras semanas en funcionamiento a 268 personas, de ellas 16 menores --todos acompañados-- y 92 mujeres.
El protocolo de atención se inicia con una primera valoración en la que analizan las situaciones personales de cada persona en función de su procedencia, características y las posibles salidas que se le pueden ofrecer, en un proceso que dura en torno a cinco días.
Una vez realizada esta primera intervención, se les deriva a unos recursos específicos de atención o a los destinos a los que ellos quieren marcharse, ya sea porque tienen alguna red de contacto, familiares o algún tipo de expectativa de futuro, ha explicado el responsable de Socorros y Emergencias de Cruz Roja en Extremadura, Víctor Domínguez.
150 plazas disponibles
En cuanto al día a día en el centro, existen unos horarios cerrados y se trata de trabajar aspectos como el conocimiento del idioma para que puedan desenvolverse. Destaca el trabajo que se realiza con cada persona para identificar casos como menores que no están reconocidos o de trata de personas, informa la Agencia Efe.
Actualmente el centro está completo con las 150 plazas disponibles, ocupadas por personas procedentes de 13 países diferentes. La mayoría viene de África central y los motivos para desplazarse son muy diversos, desde zonas de conflicto a cuestiones económicas o temas personales como matrimonios forzados.
No se descarta que el número de plazas se amplíe ya que también trabajan con recursos específicos a los que han derivado en torno a 30 personas de centros de acogida y centros para refugiados.
Con una orden de expulsión
En cuanto a la situación de los acogidos, desde Cruz Roja explican que tienen una orden de expulsión, por lo que deben intentar regularizar su situación en un tiempo estimado o regresar a su país de origen según lo que establece la ley.
Destacan que se trata de un trabajo ‘intenso’ que conlleva la implicación de muchas personas, con labores incluso de 24 horas, ya que está coordinando con el ámbito nacional, la Junta, el Ayuntamiento y la Delegación del Gobierno, y a nivel interno, con los diferentes centros de Cruz Roja.
Más de 100 voluntarios
También subrayan la labor del voluntariado, con la participación de más de 100 personas, y especialmente los equipos de respuesta en emergencia para catástrofes de la región y la sección juvenil que se ha encargado de dinamizar la vida dentro de este centro.
“Seguimos trabajando porque la salida y entrada de personas es constante”. Cruz Roja da mucha importancia a la reagrupación de las familias, ya que han llegado personas cuyos familiares se han desplazado a otros albergues o a otro tipo de recursos.
Desde la entidad Víctor Domínguez ha recordado que se han producido muchos ofrecimientos de personas individuales y empresas que han querido colaborar en el proyecto y que se han canalizado a través del propio voluntariado de la Cruz Roja para una intervención organizada algo que es “fundamental en este tipo de situaciones”.
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