Aumenta la población gallega que ve “inevitable” la violencia machista
Queda mucho camino por recorrer para erradicar la violencia machista. Es una de las posibles conclusiones del estudio sobre la “percepción” de estas conductas en Galicia que acaba de hacer público la Xunta y que, si bien refleja que el rechazo a las agresiones de género es mayoritario, también refleja datos “preocupantes”. Realizada a finales del pasado 2012, la encuesta analiza la actitud de la población del país sobre la violencia y la compara con la manifestada en el año 2005. Entonces el 93,40% de la población consideraba “totalmente inaceptable” la violencia de género, un porcentaje que ahora baja al 84,72%. Por el contrario, sube el sector de la ciudadanía que la ve “inevitable” bajo el argumento que “siempre existió”.
Las personas que consideran las agresiones machistas cómo algo prácticamente inherente a la sociedad pasan del 3,20% registrado hace ocho años al 12,69%, un incremento de más de nueve puntos. Baja, no obstante, el indicador que se fija en la población que considera la violencia “aceptable en algunas circunstancias”. En este caso, el 2,70% del año 2005 pasa al 1,50%. Con todo, el incremento de la percepción “de que la violencia constituye algo inevitable, que siempre existió” es para los autores del estudio muestra “de un cierto conformismo en la sociedad gallega”.
La distribución de estas opiniones no es homogénea. Bien al contrario, la tolerancia con la violencia machista se concentra en sectores ciudadanos muy concretos en lo que a edad y nivel formativo se refiere. Así, señala el estudio, la opinión de que la violencia de género es “inevitable” está concentrada “en mayor medida entre personas con bajo nivel de estudios y con edades que superan los 50 años”. Así, entre la población sin estudios la suma de los ciudadanos y ciudadanas que ven la violencia como “inevitable” o “aceptable” en la relación del hombre con la mujer llega casi al 50%. Mientras, en las personas que cuentan con estudios secundarios o superiores estas ideas están presentes por debajo del 20%.
“Estereotipos” en el análisis de las causas
El estudio encargado por el Gobierno gallego deja también otro análisis para la preocupación, el de la percepción de los “factores desencadenantes de la violencia de género”. Atendiendo a las respuestas obtenidas, “el abuso de alcohol” y el “consumo de drogas” es percibido como la primera causa de las agresiones por parte de más del 90% de los gallegos y gallegas. A esta respuesta la siguen, la poca distancia, los “problemas psicológicos” o mentales. Hay que esperar hasta la tercera posición para encontrar “la sociedad machista y sexista”, respuesta tras la que se encuentran otras causas como “haber sufrido maltratos en la infancia o en la adolescencia”, “la mala situación económica”, “el bajo nivel educativo”, “la violencia de las películas, televisión y videojuegos” o “las creencias religiosas”.
En este contexto, ¿cuál es la mejor vía para prevenir la violencia machista en el futuro y para “apoyar a las víctimas en el presente”? Según el estudio “la educación de niñas y niños y de la ciudadanía con criterios de igualdad desde la escuela” es considerado por el 97,6% de la población como “el elemento más importante” para “luchar contra la violencia de género” y “proteger a las víctimas”. También se encuentran en porcentajes altos la importancia que se le otorga a las “denuncias de los familiares”, con el 93,91%, “denunciar siempre y pronto”, con el 92,61%, y “que se implique el vecindario”, con el 88,71%.
Además de concederle especial importancia al entorno más próximo de las mujeres víctimas de violencia para erradicar las agresiones, las personas encuestadas también consideran mayoritariamente “que el problema de la violencia de género ha trascendido el ámbito personal o familiar” por ser “un problema social que afecta a toda la población”. Así, en opinión del 70,43% de la población, la violencia machista “compromete a todos, incluido al Estado”. Así y todo, aun persiste un 15,48% que cree “que es una cuestión personal, del ámbito de la familia”.
