Interior estudia el tercer grado para David Reboredo a petición de la cárcel de A Lama
David Reboredo, el ex drogodependiente vigués que se encuentra en la prisión de A Lama desde el 10 de diciembre condenado por dos papelinas, podría quedar en régimen de semilibertad. La junta de tratamiento de la cárcel pontevedresa ha propuesto que se le otorgue el tercer grado penitenciario, petición que ha sido enviada a la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, en Madrid, desde donde deberán ratificar la solicitud.
Fuentes penitenciarias señalan que la respuesta del órgano, dependiente del Ministerio del Interior, tardaría entre mes y medio y dos meses en ser comunicada. Fue su educador en A Lama quien le transmitió directamente esa posibilidad, después de que la junta estudiara su caso, dado que Reboredo todavía tiene pendiente que se le asigne un grado penitenciario.
La concesión del tercer grado se presenta así como una solución a medio camino entre su situación actual y la puesta en libertad que reclama. A pesar de ello, David se reincorporaría a la vida civil con condiciones. En este régimen penitenciario, el preso debe justificar las horas que no pasa entre rejas. El propio Reboredo indicó a la junta cuáles serían sus “ocupaciones”.
Pasaría las noches en el Centro de Inserción Social (CIS) de Vigo “Carmen Avendaño”, mientras que el día lo repartiría entre el programa PFIS, de la organización Érguete fundada precisamente por Avendaño, y el centro Imán-Cedro, donde venía ejerciendo antes de su condena como interlocutor para la desintoxicación de otros drogodependientes.
David podría dormir los fines de semana en su domicilio familiar, que se encuentra por otra parte muy cerca del CIS. La familia se muestra expectante ante esta posibilidad, pero mantiene la cautela.
El Gobierno ya ha denegado en dos ocasiones sus peticiones de indulto. Además, es inusual que se conceda el tercer grado tras cumplir menos de la mitad de la condena, como advierte su abogado Guillermo Presas, aunque reconoce que es una vía abierta.
Su buen comportamiento y su desintoxicación probada en el módulo seis de A Lama, uno de los módulos de convivencia, así como su participación activa en la radio de la prisión, entre otros proyectos, suman puntos para que obtenga la semilibertad. Cuenta también con un amplio y creciente apoyo social, movilizado ante lo que consideran una injusticia y un castigo desproporcionado para una persona que lleva diez años luchando por desengancharse.
Este jueves volverán a concentrarse frente al museo MARCO de Vigo, donde darán la espalda en símbolo de protesta por la falta de “justicia y equidad” del Consejo de Ministros. El acto coincide con el aniversario del nacimiento de la jurista y escritora Concepción Arenal, que dedicó parte de su vida a visitar a presos. En él, sonará la canción David contra Goliat, adaptada por el grupo moañés de hip hop Ocekaos para apoyar la causa de Reboredo.
Por otro lado, de serle concedido el tercer grado, supondría el segundo aval institucional a su causa, como reconoce su hermano Marcos Reboredo, a la espera de que el Ejecutivo acepte la última petición de indulto. El anterior se produjo a finales del año pasado, cuando el Tribunal Supremo resolvió a favor el recurso a su primera condena de 2007, rebajándola a dos años.
Sin embargo, Reboredo tiene todavía por delante cinco años y medio de prisión, de los siete a los que fue sentenciado por la Audiencia Provincial de Pontevedra. Queda de nuevo en manos del Gobierno que David pueda, ya sea en libertad o bajo el tercer grado, volver a casa.
