“Esperamos que dentro de poco ya no se tenga que hablar de Pontevedra por la feria taurina”

Galicia nunca ha sido un territorio especialmente taurino. En el año 2015 tan solo A Coruña, Pontevedra, Sarria y Padrón albergaban corridas de toros, que dependían en gran medida de las subvenciones públicas para subsistir, dado el reducido interés que despertaban en el público local. Las últimas elecciones municipales supusieron el final de este espectáculo en A Coruña o Sarria, quedando Pontevedra como la única urbe gallega que acoge este tipo de eventos.

En los últimos tiempos el sentimiento antitaurino ha ido creciendo en la ciudad. Desde hace ocho años una manifestación recorre las calles coincidiendo con la Feria de la Peregrina, que consta de tres corridas. La movilización popular gana asistencia cada verano y ha ido consiguiendo pequeñas victorias, siendo la más importante la decisión de la Diputación provincial de eliminar en 2015 la importante subvención económica que entregaba a la feria taurina. De igual manera, el mes pasado, el pleno de Pontevedra declaró simbólicamente a la ciudad “municipio antitaurino” con los votos de BNG, PSOE y Marea.

Este domingo Pontevedra acogerá la primera de las tres corridas que componen este año la feria taurina, que continuará los días 11 e 12 de agosto. Precisamente el sábado 11 de agosto una nueva manifestación (Praza da Peregrina, 20 horas) exigirá el final de la tauromaquia en la ciudad, una movilización convocada por la plataforma Touradas Fóra de Pontevedra. Si la primera manifestación, hace ocho años, tuvo el apoyo de 15 colectivos y una participación casi testimonial, en los últimos dos años superó claramente el centenar de entidades adheridas.

La movilización presenta dos grandes demandas. La primera, dirigida a la Xunta de Galicia, a la que le pide que prohíba las corridas de toros en Galicia -como ya han hecho Canarias, Cataluña o Baleares- modificando la reciente Ley de Protección Animal de Galicia, que incluye una excepción para permitir la crueldad con los toros en estos espectáculos. La segunda demanda tiene como destinatario al propio Ayuntamiento de Pontevedra, a quien se le pide que suprima el convenio que todavía mantiene con los empresarios propietarios de la plaza de toros, que todos los años reciben 35.000 euros por el alquiler del recinto para la organización de un torneo medieval, un pago que desde Touradas Fóra de Pontevedra se interpreta como una subvención encubierta a la feria taurina.

La desaparición de la cada vez más debilitada feria taurina de Pontevedra, a la que es habitual que acuda el ex presidente del Gobierno Mariano Rajoy, supondría la desaparición definitiva de la tauromaquia en Galicia. Hablamos con Victoria Estévez, una de las portavoces de la plataforma.

¿Está creciendo la movilización antitaurina en Pontevedra?

Sí, va creciendo. Cada año tenemos más apoyos por parte de entidades sociales, de colectivos de todo tipo. Y lo notamos mucho cuando hacemos algún acto en la calle o alguna campaña: la gente se acerca, quiere saber, acude a las asambleas abiertas... Tenemos que pensar que sólo llevamos diez años de campaña antitaurina. En estos diez años los avances han sido muy grandes, si los comparamos con movilizaciones de otras causas. El movimiento antitaurino crece año a año en la ciudad y hay muchísima más gente concienciada.

Aunque las corridas siguen celebrándose, ¿se están dando pasos hacia su supresión?¿Las decisiones adoptadas por la Diputación en los últimos años o la reciente declaración del pleno municipal son avances en la buena dirección?

La decisión de la Diputación fue un paso muy importante, desde luego, y la declaración aprobada en el pleno municipal, aunque es simbólica, supone un paso adelante que nos permite a nosotros hacer más presión para que el Ayuntamiento rompa el convenio que firma todos los años con los hermanos Lozano para alquilar la plaza de toros.

¿La supresión de este convenio y la exigencia de que la Xunta modifique la ley que permite la realización de espectáculos taurinos en Galicia son las dos grandes demandas de la manifestación?

Sí, esas son nuestras mayores exigencias. La primera, a la Xunta, porque no tiene ninguna lógica que los toros figuren como una excepción dentro de la Ley de Protección Animal. Y a la segunda, al Ayuntamiento, al que ya le hemos ofrecido muchas alternativas para la celebración de la Feria Franca sin que tenga que alquilar la plaza de toros, comenzando porque en el Torneo Medieval no tienen por qué usarse caballos, pues es otra forma de maltrato a los animales. Hay muchas soluciones para evitar darles dinero público a los promotores de la feria taurina. Para nosotros, el convenio del Ayuntamiento constituye una subvención indirecta a la tauromaquia.

¿Sois optimistas en este sentido? ¿Observáis una mejor receptividad por parte del Ayuntamiento?

Somos optimistas, primero, porque la movilización en la ciudad va siendo cada vez más multitudinaria. Además, ahora los hermanos Lozano reciben 35.000 euros anuales del Ayuntamiento, cuando antes eran más de 40.000. Hace unos años el Ayuntamiento, en una reunión que tuvimos con ellos, nos anunció que poco a poco iría reduciendo esa cantidad. Hubo una primera disminución, eso es cierto, pero se ha estancado ahí. Por eso nos parece importante a declaración del otro día, un paso en el buen camino.

¿Quién será la persona encargada de leer el manifiesto este año?

Será Begoña Llácer, que es la hija de María Victoria Moreno, homenajeada este año en el Día das Letras Galegas. Mucho antes de que existiera el actual movimiento contra las corridas de toros en Pontevedra, María Victoria Moreno iba por las noches con su hija y con otra niña -que casualmente era mi hermana- y pegaba carteles antitaurinos en los hoteles en los que se alojaban los toreros. Amaba los animales y montaba ella sola unas campañas antitaurinas muy importantes. Por eso para nosotros es muy importante que sea su hija quien continúe su legado, leyendo el manifiesto este año.

Para las personas que vivís en Pontevedra, supongo que no es agradable que quede señalada como el último lugar de Galicia que acoge espectáculos taurinos, que sea identificada como una ciudad taurina, cuando tiene tantas cosas de las que presumir...

Yo puedo hablar como una enamorada de mi ciudad. Y sí, es una vergüenza, es la vergüenza de nuestra ciudad tener esa plaza ahí. No por el recinto en sí, que esperamos que en un futuro se pueda dedicar a otros usos culturales o de ocio, como ya ha pasado en otros lugares. Esperamos que esto dure poco, y que no se tenga que hablar ya de Pontevedra por la feria taurina nunca más.