Las plataformas anti 'puerta a puerta', decepcionadas con el sistema mixto de Legazpi
La consulta popular fue contundente. Con más de un 50% de participación de entre los que estaban llamados a votar en Legazpi, el 97% de los votos se mostraba en contra del 'puerta a puerta' (PaP). Han hecho falta diez días para que el Gobierno municipal anuncie una decisión al respecto pero finalmente, la localidad implantará un sistema “mixto” de recogida de residuos que combinará el 'puerta a puerta' con el quinto contenedor.
El alcalde de la localidad, Kepa Urzelai, ha anunciado esta semana en rueda de prensa que aún deben estudiar una propuesta viable “económica y técnicamente”, siempre y cuando se logren las metas fijadas por el Consistorio. Su objetivo es claro, aumentar la tasa del reciclaje por encima del 73% (actualmente se sitúa entorno al 33%).
El cómo o el cuándo, quedan aún por definir, pero durante los próximos seis u ocho meses, convivirán en la localidad el PaP, el autocompostaje y el quinto contenedor, según explicaba Urzelai. Un sistema aún en proceso de estudio para el que se creará una comisión de seguimiento en la que participen “distintos agentes sociales” del municipio para valorar tanto las “tasas de reciclaje” como “la implicación de los vecinos”, según las palabras del alcalde.
El coordinador de la Plataforma anti PaP, Patxi Amantegui, califica esta decisión del Gobierno municipal como “floja” y asegura que esperaban que “se tuviera en cuenta a voluntad del pueblo”. Desde la plataforma apuestan por seguir el camino de Zumaia, y Elgueta, municipios que cuentan con el quinto contenedor, con la incorporación de un chip identificativo que según Amantegui garantiza un “control y una obligatoriedad”.
El ejemplo de Itsasondo
El año pasado, la localidad de Itsasondo ya dispuso de un sistema mixto de recogida de residuos que eliminó exclusivamente los contenedores verdes –los de todo tipo de basura–, sustituyéndolos por colgadores al estilo PaP situados, en este caso, al lado del resto de contenedores habituales. El reciclaje se efectuaba separando cada material y depositándolo en el contenedor habitual correspondiente a cualquier hora, y el resto de basura en los colgadores mediante un pequeño contenedor gris por domicilio, con horario limitado entre las 19:00 y las 22:00 horas. Las tasas de reciclaje logradas entonces “rondaban el 95%”, dice Amantegui, por lo que “no sabemos qué interés tienen en cambiar un sistema que es el que mejores resultados ha dado hasta el momento”.
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