Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
La confesión de la pareja de Ayuso desmonta las mentiras de la Comunidad de Madrid
El plan del Gobierno para indemnizar a las víctimas de abusos agita la Iglesia
Opinión - El pueblo es quien más ordena todavía. Por Rosa María Artal
Sobre este blog

Interferencia (Wikipedia): “fenómeno en el que dos o más ondas se superponen para formar una onda resultante de mayor o menor amplitud”.

Interferencias es un blog de Amador Fernández-Savater y Stéphane M. Grueso (@fanetin), donde también participan Felipe G. Gil, Silvia Nanclares, Guillermo Zapata y Mayo Fuster. Palabras e imágenes para contarnos de otra manera, porque somos lo que nos contamos que somos.

El 15M. Primero fue un enamoramiento. Ahora toca una vida en común

Stéphane M. Grueso

Decía el escritor francés Frédéric Beigbeder que 'el amor dura tres años'.

Yo, y quiero creer que mucha, mucha gente más, llevamos ya dos años de enamoramiento con el 15M, sea eso lo que sea. Dos años de pasión, redescubrimiento personal, gentes, calle, emociones, alegría, barrio, acción, ilusión, y mucho amor vaya. Así de sencillo. Y así de importante.

Pero nos vamos acercando lentamente a esa frontera invisible que marca el literato francés, o como dijo la españolísima Rocío Jurado, no sé si a alguno ya “se nos está rompiendo el amor de tanto usarlo”se nos está rompiendo el amor de tanto usarlo. Ya en este segundo aniversario comenzamos lentamente a tener “problemas de pareja”. Pero la verdad, no sé si esos problemas son en realidad entre nosotros, o sea entre cada uno y su 15M o más bien nos estamos dejando llevar por el también muy español -qué dirán- que pienso que nos sigue importando demasiado. Me explico.

Es un hecho que yo estuve (y me temo que algo sigo, bastante) enamorado del 15M, sea esto lo que sea (Insisto). Esto me lleva a ordenar mi vida en torno a él. El primer año me lo pasé prácticamente de forma íntegra en la calle. La misma experiencia que mucha otra gente que estará leyendo estas líneas, era una mezcla de tener tiempo debido a la precariedad y falta de empleo, la emoción de la calle, de hacer, del aprendizaje y una sensación de responsabilidad. La emergencia que hemos vivido en temas concretos como el de la vivienda ha motivado lo suyo también. No se pudo (ni se quiso en mi caso) evitar.

Ese primer año dejé de lado y cuasi maltratada a mi familia, a mi ya maltrecha vida profesional y se ha dado una, tal vez no demasiado sana, mezcla de todo: profesión, interés, ocio, tiempo libre, familia, casa, calle, obligaciones… Era un 15M veinticuatro horas al día. Esto es una situación anímicamente difícil y desde luego para mí económicamente insostenible.

No puedo seguir mucho más tiempo así, y parafraseando a la musa Cifuentes, tengo que 'modular' mi relación con el 15M. ¿Y qué significa eso? ¿Pasaré menos horas en las calles? Probablemente. ¿Estaré menos presente en asambleas y listas de correos? Sin duda. ¿No participaré en tantos dispositivos y movidas varias como hasta ahora? Pues me temo que tampoco eso será posible. ¿Significará eso “hacer menos 15M”? Pues claro que no.

Ahora se trata de pasar del 'enamoramiento' a la fase de 'la vida en común'

Al escribir estas palabras me embarga inevitablemente cierta nostalgia. Pero no, esto es bueno. Siempre digo que en el 15M ya hemos ganado. El 15M venció cuando cambió a personas. No es un movimiento social o una revolución… Es mucho mejor, mucho más. Por eso, aunque yo ahora “desaparezca” algo, seguiré haciendo 15M. El 15M y yo estamos ya unidos. Nuestra trayectoria juntos sigue. Ahora tengo que trabajar en sostenibilidad. Encontrar trabajo, ganarme la vida, cuidar a mi familia. Es mi responsabilidad. Pero hacer todo eso desde un prisma quincemayista, usando ese adjetivo que tanto le gustaba al bueno de José Luis Sampedro.

¿Es posible que en algún momento me olvide del 15M? ¿Que dedique mis esfuerzos, desvaríos y anhelos a otra causa? ¿O a ninguna...? Pues supongo que sí. Ahora soy incapaz de imaginármelo -es lo que tienen los enamoramientos- pero supongo que podría llegar a pasar.

En cualquier caso ahora soy feliz pensando, creyendo, y como dicen los políticos estando convencido de que no. De que el 15M en mí, ha llegado para quedarse, al igual que en muchas otras personas (cosa que creo de corazón) y esa es nuestra gran victoria. Eso es lo bueno. Lo que los tiene desconcertados. Ése es el verdadero 15M.

Ahora queda la parte fácil. Además de cuidar las emergencias que nos asolan cada día y ayudar al vecino al que le va peor que a ti, y que siempre lo hay, vaya, tenemos que gestionar este cambio personal. Descubrir qué es el 15M, qué es lo que significa para cada uno de nosotros. Cómo hemos cambiado. Cómo articular esta victoria, cómo hacer esas acciones micropolíticas juntos, cómo conseguir pequeñas victorias, o grandes, y claro, a la larga: cómo cambiar el mundo. No tenemos que aspirar a menos.

Burócratas, oligarcas, tiranos, representantes de los viejos poderes...

¡TEMEDNOS! ¡HABÉIS PERDIDO! ¡HAN GANADO LAS PERSONAS!

¡Estamos vivos! ¡Somos muchos y tenemos la razón! ¡Qué felicidad!

[Artículo originalmente publicado en el número 15 de la edición impresa del Periódico Madrid15M]

Sobre este blog

Interferencia (Wikipedia): “fenómeno en el que dos o más ondas se superponen para formar una onda resultante de mayor o menor amplitud”.

Interferencias es un blog de Amador Fernández-Savater y Stéphane M. Grueso (@fanetin), donde también participan Felipe G. Gil, Silvia Nanclares, Guillermo Zapata y Mayo Fuster. Palabras e imágenes para contarnos de otra manera, porque somos lo que nos contamos que somos.

Etiquetas
stats