La isla de Mayotte se convierte en la novena región ultraperiférica de la UE

La isla de Mayotte, territorio francés de ultramar ubicado entre Mozambique y Madagascar, en el océano Índico, se convirtió hoy, de forma oficial, en la novena región ultraperiférica (RUP) de la Unión Europea (UE).

La isla afianza así sus viejas aspiraciones europeístas, que comenzaron a manifestarse a mitad de la década de los años 70 del pasado siglo, cuando el archipiélago de las Comoras, hasta entonces territorio de ultramar francés, se declaró independiente.

Mayotte, que políticamente todavía formaba parte de dicho archipiélago, optó por seguir bajo la soberanía de Francia.

En 1974, un referéndum sobre la independencia organizado por el Movimiento Popular de Mayotte (MPM), mostró que solo la isla de Mayotte, con un 63,8 % de votos a favor, quiso continuar siendo francesa, según apuntan fuentes oficiales.

En 1976, una segunda consulta refrendó esta postura: un 99,4 % de los votantes de la isla se mostró a favor de mantener sus vínculos con el país galo.

El apego por la metrópoli chocó desde el primer momento con los intereses del gobierno de las Comoras, que sigue considerando a Mayotte parte de su territorio.

Pero el departamento ultramarino ha dejado claras sus intenciones cada vez que ha tenido ocasión, con el fin de crear vínculos estables con París que le permitan beneficiarse de los derechos de la ciudadanía francesa.

En el año 2000, sus ciudadanos respaldaron, con un 72,94 % de votos a favor, el acuerdo al que llegaron el gobierno francés y los principales grupos políticos de la isla para “fijar objetivos comunes” y emprender reformas estatutarias.

Finalmente, en el año 2011, tras un nuevo referéndum celebrado en 2009 y que se saldó con un total del 95,2 % de votos a favor, la isla se convirtió en departamento de ultramar.

La estrecha relación con Francia le ha permitido a Mayotte destacarse como la economía más fuerte del archipiélago, con un Producto Interior Bruto (PIB) por habitante casi 10 veces superior al de las Islas Comoras en 2009, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística francés (INSEE) y del Banco Mundial (BM).

No obstante, Mayotte también ha atravesado por dificultades y en 2011, después de que Francia eliminase las tasas aduaneras sin inyectar una compensación económica, encareciendo así los productos básicos, la isla se vio sacudida por una ola de disturbios.

Las islas Comoras, por su parte, han encadenado crisis políticas desde su independencia, salpicadas por golpes de estado y el asesinato y secuestro de algunos de sus dirigentes.

Las diferencias entre ambos territorios han provocado que los habitantes del país africano, considerados inmigrantes ilegales en Mayotte desde 2011, arriesguen su vida cruzando el mar para intentar llegar a suelo francés.

Durante los últimos tres años, varias personas han perdido la vida a consecuencia del hundimiento de los “kwassa-kwassa”, embarcaciones con forma de canoa y equipadas con un motor que navega a ras del agua, en los que intentaban alcanzar la costa de Mayotte.

Con sus más de 200.000 habitantes, según el INSEE, Mayotte, de mayoría musulmana (95 % de la población), es el quinto departamento ultramarino de Francia que forma parte de las regiones ultraperiféricas de la UE, junto a Guadalupe, la Guayana francesa, Martinica y la Reunión.

Formada por dos islas principales, la propia Mayotte y Pamanzi, que suman una superficie total de 374 kilómetros cuadrados, y una treintena de islotes, el departamento ultramarino es la isla más antigua de todo el archipiélago en términos geológicos.

Europa persigue con estas adhesiones minimizar “las dificultades” propias de las regiones ultraperiféricas (RUP), tales como el alto índice de paro o la dependencia económica del exterior y “valorizar sus ventajas en tanto que lanzaderas de desarrollo económico”.

La Comisión Europea define a las RUP como los “territorios alejados geográficamente del continente que son parte integrante de los Estados miembros a los que pertenecen”, que tienen un estatus diferente a los países o territorios de ultramar (PTU).

Además de los cinco departamentos franceses, el resto de territorios que integran las regiones ultraperiféricas de la UE son la isla de San Martín (colectividad de ultramar francesa), las Azores y Madeira (regiones autónomas de Portugal), y Canarias.