Miles de iraníes conmemoran hoy la toma de la embajada de EEUU en 1979

Miles de iraníes conmemoran hoy con marchas anti-estadounidenses y gritos de “Muerte a América” el 34 aniversario de la toma de rehenes en la embajada de EEUU en Teherán, que puso fin en 1979 a las relaciones entre los dos países.

El Día del Estudiante o Día Nacional de la Lucha Contra la Arrogancia Global es la jornada iraní que saca a la calle a los grupos más conservadores y contrarios a restablecer relaciones con EEUU.

En los últimos días, clérigos y grupos radicales han instado a la población a acudir masivamente a las manifestaciones de hoy, sobre todo a la vista de los avances del gobierno de Hasán Rohaní, que intenta mejorar sus relaciones con Occidente y mantuvo en septiembre la primera conversación telefónica en más de tres décadas entre un presidente iraní y uno estadounidense (Barack Obama).

“Yo iré a la manifestación, igual que otros años, para mostrar nuestra desconfianza a Estados Unidos”, dijo a Efe Fatame Rahmaní, estudiante universitaria religiosa, que se apresuró a matizar que esta desconfianza “no es hacia el pueblo (norte)americano, sino hacia su Gobierno”.

Según ella, “no se puede confiar en EEUU, porque nos ha engañado muchas veces”, algo de lo que, asegura, Rohaní es consciente aunque haya optado por negociar con Washington en el marco de las conversaciones con Occidente sobre su programa nuclear.

Esta joven, junto con otro millar de personas, acudió el sábado a la Conferencia Muerte a América, convocada por el grupo Cyber Hizbulá con el objetivo de promover la participación en las marchas anti-estadounidenses de hoy.

El clérigo Kiani Nasab, de 62 años, también participante en el evento, declaró a Efe que acudirá hoy a la protesta con el fin de “defender al pueblo iraní”.

En su opinión, “nunca será posible alcanzar la amistad con EEUU, porque la amistad del lobo con el cordero es imposible”.

La marcha central tendrá lugar hoy a media mañana en las calles de Teherán y culminará en el edificio que albergaba en los años setenta la embajada norteamericana, convertido hoy en un museo anti-estadounidense lleno de consignas contra Washington y al que los radicales se refieren como “nido de espías americano”.

En 1979, después de que la revolución islámica lograse expulsar al último Sha de Persia, Mohamed Reza Pahlavi, un grupo de guardias revolucionarios y estudiantes islámicos tomó la legación estadounidense y capturó a 52 funcionarios, a los que mantuvieron rehenes durante 444 días.

Ese suceso, y la falta de ayuda por parte del nuevo régimen islámico para agilizar la liberación, puso fin a las relaciones diplomáticas entre los dos países, que aún no han sido restauradas.