Trump, a Putin: “El mundo quiere que nos llevemos bien”
La primera cumbre formal entre Trump y Putin comenzó este lunes en torno a las 14:10, hora local en Helsinki (11.10 GMT), con unas breves declaraciones de ambos mandatarios, sentados el uno junto al otro con expresiones serias en el Palacio Presidencial de la capital finlandesa.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha declarado que confía en desarrollar una relación “extraordinaria” con su homólogo ruso, y ha evitado cualquier referencia a la presunta injerencia de Moscú en las elecciones estadounidenses. “Realmente creo que el mundo quiere que nos llevemos bien”, ha dicho Trump a Putin al comienzo del encuentro.
Creo que como países tenemos grandes oportunidades juntos. No nos hemos llevado muy bien durante los últimos años, yo no llevo tanto (en el poder) pero son casi dos años ya. Creo que acabaremos teniendo una relación extraordinaria“, ha pronosticado Trump.
El mandatario estadounidense ha recordado que Putin y él lideran “las dos grandes potencias nucleares del mundo” y ha dicho que “eso no es algo bueno, sino malo” y que espera que puedan hacer algo al respecto. “Tendremos conversaciones sobre todo tipo de cosas, desde el comercio hasta las Fuerzas Armadas, los misiles y lo nuclear, y sobre China, hablaremos un poco sobre China, nuestro amigo común el presidente Xi Jinping”, ha subrayado Trump.
Por su parte, Putin se ha mostrado contento de poder reunirse con Trump “en el hospitalario suelo de Finlandia” y le ha pedido hablar de los “puntos de tensión en el mundo” sobre los que las dos potencias tienen posturas encontradas. “Ha llegado la hora de hablar detenidamente, tanto de las relaciones bilaterales como de los distintos puntos de tensión en el mundo, y son bastantes para que les prestemos atención”, ha señalado Putin.
El jefe del Kremlin ha revelado que mantiene “contactos permanentes” con su homólogo estadounidense: “Nosotros hemos hablados por teléfono y nos hemos reunido varias veces en el marco de diversos eventos internacionales”.
Los dos mandatarios tenían previsto reunirse durante una hora y media a solas, con la única compañía de sus intérpretes, antes de mantener un almuerzo de trabajo junto a sus respectivas delegaciones y una conferencia de prensa.
