Un empleado del Congreso italiano puede llegar a jubilarse con 136.000 euros
La operación de transparencia informativa del Gobierno italiano ha permitido conocer no sólo los sueldos de los políticos, sino también las rentas de todos los empleados del Congreso de los Diputados con sede en Roma, y se ha podido saber que hay trabajadores que, de llegar a los 40 años de actividad, pueden percibir incluso más de 350.000 euros brutos anuales.
En momentos de austeridad presupuestaria debido a la crisis, el dato relevante es que son 1491 los trabajadores actualmente contratados a través de concursos públicos para formar parte de la institución.
La Cámara de los Diputados divide el personal, en términos de renta, en cinco categorías en orden de menor a mayor retribución: operador técnico, asistente parlamentario, colaborador técnico, secretario parlamentario, documentalista técnico, consejero parlamentario, vicesecretario general y secretario general. Los dos últimos pueden ganar, en el momento de asumir el cargo y sin exigirles ningún tipo de veteranía laboral, 300.000 y 400.000 euros respectivamente.
También hay una subdivisión por tiempo trabajado: hasta los 10 años, de 11 a 20, de 21 a 30, de 31 a 35, de 36 a 40 y con más de 40 años en activo. Los 1491 empleados tienen derecho a un aumento bienal del 2,5%.
El resto del personal no percibe los 400.000 euros, pero sus ganancias no son reducidas. Tomando el caso de un operador técnico, como puede ser un barbero, un electricista o un carpintero que lleve trabajando, por ejemplo, unos 22 años en el Congreso; percibe unos 7.500 euros brutos al mes.
Fuentes internas del Congreso de los Diputados italiano eluden concretar a eldiario.es las retribuciones concretas: “Por razones de protección de datos no podemos facilitar cuánto ganan exactamente”. “Se trata de un personal que lleva muchos años trabajando. Profesionales de este tipo, por el motivo que sea, son parte de la tradición y la historia de nuestro Parlamento”, comentan.
Los colaboradores técnicos son los que ven aumentar su sueldo más rápidamente con el pasar de las décadas. En esta categoría entran, por ejemplo, los técnicos de audio y vídeo de las señales de radio, televisión e internet de la Cámara Baja. En la primera década cobran 30.000 euros, en la segunda 61.000, en la tercera 136.000 y en la cuarta 152.000 euros brutos anuales.
El debate acerca del sueldo sobredimensionado de los empleados del Parlamento italiano en plena crisis coincide estos días con una sesión del Congreso, celebrada el martes, en medio de las vacaciones estivales (la próxima sesión será el 6 de septiembre) y en la que sólo había 104 diputados en lugar de los 630 que deberían estar presentes.
Esto ha traído consigo tensiones. El parlamentario Walter Rizzetto, del Movimiento 5 Estrellas de Beppe Grillo, apuntaba estas palabras el pasado martes: “No es verdad que hemos vuelto al trabajo, estaremos aquí sólo algún que otro minuto. La jornada de hoy ha costado aproximadamente unos 200.000 euros entre logística y servicios, pudiéndolos asignar a las asociaciones en contra de la violencia”. La declaración ha enfurecido la presidenta de la Cámara Baja, Laura Boldrini (Partido Democrático): “¿Usted no entiende que es una obligación estar aquí? La Constitución nos lo pide”.
