El jefe negociador colombiano espera que las FARC renuncien a la violencia

El jefe negociador del Gobierno colombiano en el diálogo de paz con las FARC, Humberto de la Calle, dijo hoy que espera que ese grupo guerrillero comparta el anhelo de paz del pueblo y esté dispuesto a renunciar definitivamente a la violencia.

“Creemos que la oportunidad de terminar el conflicto es aquí y ahora. Los colombianos lo entienden bien. Esperamos que las FARC compartan este anhelo, que estén dispuestos a renunciar definitivamente al uso de la violencia”, dijo De la Calle en un balance que hizo en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo, al cumplirse un año del inicio de las conversaciones de paz en Cuba.

En esa línea, se refirió a planes de la columna móvil Teófilo Forero de las FARC de atentar contra el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010) y contra el fiscal general, Eduardo Montealegre, según denunció la semana pasada el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.

“No hay espacio para el magnicidio, ni para el atentado personal, eso debe quedar claro”, expresó el jefe negociador del Gobierno.

De la Calle descartó, sin embargo, que las revelaciones sobre los planes de atentados, de los cuales el Gobierno no ha dado mayores detalles, puedan afectar a las negociaciones porque existe el compromiso de que los diálogos se ciñan estrictamente a los puntos pactados previamente.

“En respetar la agenda pactada la delegación del Gobierno ha sido celosa y lo seguirá siendo. Por fuera de los temas acordados no discutiremos con las FARC. Ellos lo saben bien, al igual que todos los colombianos, porque lo hemos dicho varias veces públicamente”, afirmó.

La agenda de diálogo tiene seis puntos: política de desarrollo agrario integral, participación política, fin del conflicto, solución al problema de las drogas iícitas, víctimas, implementación, verificación y refrendación de lo acordado.

Los dos primeros puntos ya concluyeron con preacuerdos y el próximo 28 de noviembre las partes reanudarán las conversaciones en la capital cubana para abordar el tema de las drogas ilícitas, que de común acuerdo pasó a ser el tercero a debate.

“Estamos en un proceso serio y bien encaminado, construido sobre bases sólidas y realistas. Nunca antes en una negociación con las FARC habíamos avanzado tanto como lo hemos hecho hasta ahora”, expresó.

De la Calle se refirió a las frecuentes críticas de opositores al proceso de paz, y afirmó que es hora de hacer todos los esfuerzos necesarios para poner fin a medio siglo de conflicto armado.

“No le estamos entregando el país a los terroristas como algunos dicen. Estamos buscando acuerdos razonables, buenos para el país, respetando nuestras tradiciones democráticas y el espíritu de nuestra Constitución, para terminar la guerra e iniciar una fase de construcción de la paz en la que deben participar todos los colombianos sin distingos”, afirmó.

Tras recordar que varias generaciones de colombianos no han tenido “un momento de sosiego” por el conflicto armado, De la Calle concluyó que “es la hora de entregar a nuestros hijos y a nuestros nietos una Colombia en paz”.