El videojuego creado por un niño de 9 años.

Todo los padres del mundo piensan que sus hijos son los más guapos, más simpáticos y más listos del mundo. Por desgracia el amor que les profesamos no nos deja ver con objetividad lo que hemos traído al mundo. A pesar de todo en algunos casos puede que sí sea verdad.

El “gurú” de los videojuegos John Carmack, responsable de hacer realidad juegos tan míticos como Wolfenstein 3D, Doom, Quake nos demuestra esta vez que lo de hacer hijos tampoco se le da mal. Y es que Ryan, su hijo de nueve años, ya demuestra aquello de “de tal palo tal…¿joystick?”.

Y es que el “pequeñajo” de nueve años es ese niño del que todo padre presumiría. Con tan temprana edad ha desarrollado un videojuego basado en el clásico Pong con la ayuda de su hermano mayor, el cual se ha encargado del apartado sonoro y test, al que ha llamado “Angry Face” debido a que la pelota que rebota de un lado para otro pone caras de cabrearse cada vez más y más.

La idea parece sencilla pero tiene notables complejidades como las opciones de elección del nivel de dificultad desde “modo abuelita” para los más lentos de reflejos y el “modo pro” para los más frenéticos.

Como al fin y al cabo se trata de un niño, se muestra entusiasmado y algo nervioso al explicar que la idea es bastante simple, en definitiva, y que se trata del primer juego que crea. Afirma también que desea en un futuro desarrollar otros juegos y que espera que a la gente le guste su trabajo. ¿No es para comérselo?

Han creado una web en la que se puede ver la creación de esta joven promesa así como pequeños relatos que muestran todo el proceso de creación. Viendo el apellido que porta la criatura no dudamos que probablemente cumpla el sueño de ser “creador de videojuegos como su papá”.