El jueves será un día clave para las protestas del campo

13 de febrero de 2024 01:32 h

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha convocado a las organizaciones profesionales agrarias, a una reunión este jueves, 15 de febrero, en la sede del ministerio. En concreto, se ha convocado a la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) y la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA).

En La Rioja las organizaciones agrarias mantuvieron este lunes un encuentro con los 'chalecos amarillos' en la que no se alcanzó un claro acuerdo. De hecho, se les dio de plazo hasta las cuatro de esta tarde para que tomaran una decisión. Los agricultores que llevan protestando ya una semana tienen claro que las reivindicaciones tienen que seguir pero asumen que no puede hacerse con la misma intensidad porque tienen el campo desatendido y hay tareas agrarias que no pueden esperar y porque saben que no pueden continuar obstaculizando las carreteras y las ciudades, “porque al final molestamos a los nuestros, a la gente que nos apoya y consume nuestros productos”.

Por eso decidirán en los próximos días hacia dónde dirigen ahora sus protestas. En algunas zonas de La Rioja los tractores seguirán saliendo pero lo harán por turnos, para poder alternar las protestas con los necesarios trabajos en sus tierras. En otras zonas como Cenicero, lo que se ha decidido es aparcar los tractores en las carreteras para seguir dando visibilidad pero poder trabajar al mismo tiempo. Así se está haciendo en otras zonas de España donde además, se comienzan a hacer campañas informativas en los supermercados. Ataviados con chalecos amarillos, los agricultores reparten panfletos e informan a los consumidores de cuáles son los productos que vienen de fuera y qué supone compararlos frente a los productos españoles.

La Unión de Agricultores y Ganaderos de La Rioja ha celebrado hoy una asamblea extraordinaria en la que, tras un intenso y fructífero debate, ha terminado con la defensa unánime de la unidad de acción del sector agrario. 300 afiliados y afiliadas a la UAGR han rebasado el límite de aforo del salón de actos de la bodega institucional de La Grajera, por lo que han tenido que trasladar la Asamblea Extraordinaria al restaurante de la gasolinera.

Por su parte, la organización agraria ARAG-ASAJA ha asegurado que pondrá encima de la mesa todas las reivindicaciones del campo riojano en la próxima reunión concertada por el ministro. La Junta Directiva de ARAG-ASAJA se ha reunido esta mañana para analizar las peticiones de los responsables de las movilizaciones de estos días y ha decidido respaldar dichas peticiones, comprometiéndose a canalizarlas hacia los foros institucionales que hagan falta.

Recuerdan que estas exigencias son las mismas que se llevan reivindicando en las diversas movilizaciones desde hace años y negociando con las diferentes administraciones con el fin de revocar las diferentes normativas que están ahogando al campo. Además, la organización agraria se compromete a preservar la unidad de acción con el fin de trasladar un mensaje de fortaleza de todo el sector agrario riojano ante instancias estatales y europeas.

Estas son las exigencias según ARAG-ASAJA entre las que no se incluye ninguna referencia al arranque subvencionado, la retirada del vino de mesa o la bajada de rendimientos:

Rediseño de la PAC para que se centre en rentabilidad y no únicamente en imposiciones medioambientales que complican la tarea de agricultores y ganaderos hasta hacer casi inviable su trabajo. Exigencias que no vienen acompañadas de contraprestaciones económicas que las compensen.
Paralización de las negociaciones de acuerdos entre la Unión Europea con MERCOSUR, Nueva Zelanda, Chile, Kenia, India, México, Australia… Aumentar los controles en la frontera con Marruecos y otros países para garantizar que sus productos cumplan con las mismas normativas a los que son obligados los productores europeos.
Modificación y ampliación de la Ley de la Cadena Agroalimentaria para prohibir las prácticas desleales y que los precios de los agricultores y ganaderos cubran realmente los costes de producción. Que la AICA (Agencia de Información y Control Alimentario) aplique sanciones económicas que sean disuasorias y que se amplíen sus recursos de control como se hace en aquellos ámbitos que controlan a los agricultores y ganaderos.
Medidas que faciliten la incorporación de jóvenes al sector, eliminando las trabas que la dificultan actualmente.
Que todas las administraciones reduzcan hasta límites razonables la tremenda carga administrativa que soporta el sector agrario, hasta el punto de suponer costes económicos y de tiempo inasumibles.
Una política fiscal que compense al sector perjudicado por el aumento de costes derivado de la guerra de Ucrania y otros conflictos, así como de la sequía.
Que se garantice que todos los viticultores que lo necesiten puedan acogerse a la vendimia en verde, y que se compense la reducción de rendimientos.
Apoyo, financiación y facilitación de trámites para los sectores más afectados por la falta de rentabilidad, como están haciendo otras Comunidades (ganadería, frutos secos, champiñón y setas, herbáceos…).
Recuperación del presupuesto reforzado para los seguros agrarios con el fin de adaptarlos a las sequías y fenómenos meteorológicos adversos, cada vez más intensos y recurrentes por el cambio climático.
Apoyo al sector ganadero, con revisión de las normativas estatal y europea que condicionan su rentabilidad (sanidad y bienestar animal, gestión de residuos, lobo…)
Freno a la instalación de parques de renovables en terrenos de interés agrario.