La polémica salpica el derribo del viejo cuartel de la Guardia Civil de Calahorra

La Junta de Gobierno Municipal de Calahorra ha aprobado el expediente para contratar el proyecto de derribo de los edificios del viejo cuartel de la Guardia Civil. Este proyecto -no su ejecución- ha sido licitado en 7.000 euros y desde su publicación hay 16 días para la presentación de ofertas que mejoren este presupuesto y 20 días más para la presentación del proyecto.

Este acuerdo de la Junta de Gobierno, ha sido interpretado por la concejal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Calahorra, Cristina Moreno, como el resultado de “la prisa que tiene el Equipo de Gobierno Municipal por tirar el viejo cuartel de la Guardia Civil ante la posibilidad de que la Comisión Provincial de Patrimonio declare el antiguo acuartelamiento como Bien de Interés Cultural”.

Moreno ha hecho esta declaración en el transcurso de una rueda de prensa que ha ofrecido esta mañana junto al coordinador de la Agrupación de Ciudadanos Calahorra, Jesús López, para dar a conocer los resultados de la encuesta popular sobre el derribo del antiguo acuartelamiento que realizó este partido el pasado sábado.

Al margen de los resultados de la encuesta sobre el cuartel, que no estaba relacionada con la protección del edificio, Moreno ha recordado que, “a título particular un ciudadano solicitó el pasado mes de abril la declaración de Bien de Interés Cultural para el viejo cuartel. En el mes de junio -ha seguido diciendo- Patrimonio dijo que necesitaba más información para poder valorar si iniciaba el expediente de protección”.

Ciudadanos dice que “no le parece correcto que se decida el derribo antes de que Patrimonio se pronuncie” y asegura que en el Ayuntamiento hay “una comunicación de las autoridades de Patrimonio que indica que no procede el derribo si no hay una justificación de peligro físico por ruina. Parece ser que el Equipo de Gobierno no considera vinculante esta comunicación”.

Unos minutos más tarde estaba convocada una rueda de prensa del PP para dar cuenta precisamente de los asuntos aprobados en Junta de Gobierno en la que, en efecto, se ha aprobado el derribo y en la que el alcalde calagurritano ha negado rotundamente la existencia de ninguna orden de Patrimonio sobre el viejo cuartel.

Luis Martínez-Portillo ha tomado la palabra para decir que no le consta “ningún expediente que nos impida tirarlo; por lo que seguiremos con los

En cuanto a la resolución de alegaciones, “fueron desestimadas”. El alcalde ha añadido que “existen los informes de los técnicos que han redactado el Plan General Municipal -que regula el urbanismo- y los informes de los partidos políticos, incluido el del PSOE que está completamente de acuerdo en derribar”; si bien hay que señalar que este partido está en desacuerdo con la construcción de un párking en su lugar.

Martínez-Portillo ha añadido que la protección de la totalidad del viejo cuartel “sería una decisión nefasta porque supondría la ruina económica para la ciudad por el coste de su renovación”. En cualquier caso el alcalde ha dicho que ni él ni sus compañeros tomarían “ninguna decisión que contravenga la ley”.

Tampoco al Grupo Municipal Socialista le consta una comunicación del Patrimonio en el sentido apuntado por la concejal de Ciudadanos. La portavoz socialista, Elisa Garrido, en conversación informal ha hablado de una misiva, no ya de la Comisión Provincial de Patrimonio, sino de su presidente interesándose sobre el tema del cuartel para tener al parecer más conocimiento sobre el edificio, “pero nada más”.