“Cifuentes era la gran esperanza y el futuro del PP pero vemos cómo se va descomponiendo”

“Cifuentes no ha presentado todavía un solo documento que refute las pruebas publicadas desde eldiario.es y por eso no la creemos”. La portavoz de Podemos en la Asamblea de Madrid, Lorena Ruiz-Huerta (Madrid, 1977), pide a la presidenta “explicaciones con papeles con validez real” o la dimisión. Su grupo no quiere cerrar una garantía de apoyo a la moción de censura planteada como posibilidad por los socialistas y señala, en todo caso, que la última palabra la tendrá Ciudadanos. Los números no llegan sin su abstención, “y no nos la van a dar a cambio de nada”, señala. 

En clave interna, Ruiz-Huerta no descarta presentar una candidatura alternativa a la de Iñigo Errejón de cara a las autonómicas de 2019, que se da por segura a falta de confirmación oficial. La actual portavoz advierte: “Las primarias pueden ser un puro trámite para designar a quien ha sido elegido a dedo desde arriba o democráticas de verdad”. 

Considera que Cifuentes no ha dado aún explicaciones “mínimamente convincentes” sobre su máster. ¿Qué pruebas tendría que aportar para convencer a su partido?

Decía Enrique Ossorio, el portavoz del grupo parlamentario popular y uno de sus escuderos, que nuestra voluntad es no creerla y por eso ella no presenta nada. Bastaría con que presentarse un documento que dejara en evidencia que las informaciones de eldiario.es son falsas. Son demostraciones de que se ha incumplido el procedimiento establecido para que una alumna apruebe un máster. Cifuentes no ha presentado un solo documento que refute las pruebas publicadas desde eldiario.es y por eso no la creemos.

También es cierto que miente desde que la conocemos. Ha mentido por muchas otras cosas. Llueve sobre mojado y nos parece que su credibilidad está más que en entredicho. No es posible tener ni siquiera el beneficio de la duda de que Cifuentes podría haber hecho las cosas de la manera en la que dice que las hizo y no como demuestran las pruebas.

Toda la oposición comparte esta desconfianza y, de hecho, los tres grupos han forzado su comparecencia en la Asamblea. ¿Qué esperan de esas explicaciones?

Desde mi grupo estamos empeñados en que dé explicaciones pero con documentos. Y creo que solo tiene dos opciones. El 4 de abril de aparecer en la Asamblea con el trabajo de fin de máster, con un documento que acredite el registro informático de haber presentado el trabajo en julio y prueba documental de que cursó ese máster. Necesitamos una explicación apoyada en documentos con una validez real, no lo que nos presentó el otro día. Y si no tiene un papel que demuestra que esta información es falsa, solo le queda la dimisión. Tengo pocas expectativas, pero tiene una magnífica ocasión para aclarar todo, demostrar que es mentira lo que dice eldiario.es y que todo quede en una anécdota del pasado. 

No puede seguir al frente del Gobierno una persona que ha participado presuntamente en la comisión de un delito, que ha falseado su expediente académico, y que es la máxima responsable de las universidades madrileñas y  miembro de un partido que ha subido tanto las tasas que ha expulsado de la universidad a miles y miles de alumnos.

No es sostenible. Una presidenta que tiene que estar todo el día defendiéndose de acusaciones de toda índole no puede ocuparse ni estar concentrada y tranquila en resolver los problemas de los madrileños.

Si continúa, ¿en qué situación encara la recta final de la legislatura y su candidatura para 2019?

Si cometiera la tremenda irresponsabilidad de continuar pese a no haber conseguido acreditar que lo que dice es cierto, estaría deteriorando las instituciones madrileñas. Si la universidad funcionara de esta manera de forma generalizada, sería el declive de todo el sistema educativo. Los políticos deben ser ejemplares. No solo está en entredicho porque tiene un expediente judicial por el contrato de la cafetería o la señala uno de los cabecillas de la trama Púnica, sino que ahora encima resulta que le han regalado un máster para adornar su curriculum o facilitar la puerta giratoria de vuelta a la universidad cuando termine su carrera política. 

Algunos sectores del PP opinan que si cae Cifuentes, cae el PP de Madrid. ¿Lo comparte? ¿Tienen alternativa?

Cifuentes lleva 30 años en el PP ocupando cargos de mucha responsabilidad. Le habían construido esa imagen de mirlo blanco, alejada de la corrupción del partido. Era la gran esperanza y el futuro del partido, pero vemos cómo se va descomponiendo como un azucarillo en el café.

Al PP cada vez le quedan menos posibilidades de levantarse de esta decrepitud. No tiene muchas figuras a las que agarrarse para intentarse reconstruir y vender la idea de algo regenerador y diferente. Lo vimos con Gallardón y lo hemos vimos con el ensueño de Cifuentes, que no ha sido capaz de mantenerse una legislatura sin que su credibilidad esté por los suelos. El partido lo tiene difícil para remontar, y más ahora que la derecha tiene su recambio, el partido naranja, que ha venido a ocupar su lugar. Y es posible que pase si en la izquierda no nos ponemos las pilas con suficiente fuerza y energía. 

¿Es el momento para una moción de censura?

De eso ha hablado el PSOE. Qué te puedo decir sobre la moción, si presentamos una el año pasado porque se encarceló a Ignacio González. Motivos para echar al PP hay desde hace muchos años. Somos lo primeros interesados en echarles. Pero ahora mismo, respecto a estos hechos, nuestro empeño es que comparezca y dé explicaciones si las puede dar. Si no, tiene que dimitir y después veremos qué opciones se presentan.

La mirada debe dirigirse a Ciudadanos. Son los que están sosteniendo al PP en el Gobierno. Ignacio Aguado ha seguido sosteniéndoles, hay que preguntarles qué más necesitan para seguirles apoyando. No creo que debamos ocupar el poder a cualquier precio ni de cualquier manera. Apoyaremos un gobierno alternativo y una moción de censura, que nos parece una buena opción y nosotros mismos la protagonizamos el año pasado sin ningún apoyo, pero sobre la base de acuerdos programáticos y acuerdos sociales amplios. 

¿El tiempo que resta hasta las elecciones juega a favor o en contra?

Es verdad que los tiempos son los que son. Habrá que pensar qué hacemos. Qué es lo mejor para la región porque queda solo un año para las elecciones. Pensarlo con calma, porque nos jugamos mucho. Ahora es precipitado hablar de moción de censura. Hay que empujar entre todos para que dimita si no da explicaciones convincentes. El precedente de Ciudadanos también me parece inquietante. En Murcia, les bastó con que dimitiera el presidente imputado por corrupción y llegara el siguiente. El problema del PP es que si Cifuentes dimite, el problema sigue intacto. No son figuras aisladas, son las políticas. 

¿La apoyarían si el PSOE la presentara? ¿Ha habido conversaciones?

Hemos hablado de manera informal. Nos vemos permanentemente en la Asamblea, hemos tenido mucho contacto. Hemos hablado, sobre todo, sobre cómo hacer comparecer a la presidenta. De la moción, un poco, pero sin concretar.

¿Le han trasladado a los socialistas ese apoyo de manera explícita?

No les podemos dar ese mensaje y, si se ha transmitido, no puede ser así. Nuestra hoja de ruta no es dar un cheque en blanco al PSOE. Son el otro partido supuestamente progresista pero nos ha dejado tirados en la moción del año pasado cuando ni siquiera con sus votos habría salido adelante. En otras ocasiones nos ha dejado solos y no se sabe muy bien de lado de quién están. Tendríamos que hablar largo y tendido para poder apoyarles. Tampoco sé qué papel jugaría Ciudadanos, porque necesitaríamos su abstención y no nos la va a dar a cambio de nada. Aunque lo cierto es que a Cifuentes le están dando el apoyo gratis mientras incumple el punto tres del acuerdo. Ciudadanos ha tenido en su poder la llave del Gobierno y no la ha utilizado para conseguir nada. Las declaraciones son súper violentas y contundentes en ruedas de prensa pero luego no hacen absolutamente nada. 

eldiario.es ha desvelado en estos días múltiples vínculos entre la Universidad Rey Juan Carlos y dirigentes del PP. ¿Qué responsabilidad tiene la universidad en este caso?

Me duele decirlo por los miles de estudiantes y profesores que cursan o imparten estudios allí y son honestos y trabajadores, pero creo que la credibilidad después de este espectáculo y de lo que vivimos con el rector y los plagios está en entredicho. Pareciera que la Universidad, que se montó en los años de gobierno de Gallardón, fuera poco menos como un lugar usado por el PP para colocar a familiares y allegados, o para garantizar retiros dorados de sus integrantes. Que un departamento de una universidad pública haya dado cobijo a un diputado que ha tenido que dimitir por corrupción [en referencia al exalcalde de Móstoles Daniel Ortiz] es escandaloso. 

No me creo las explicaciones que han dado. Desconozco si ha habido presiones para que actúen de esta manera. Pero esto hace un flaquísimo favor al prestigio de esta universidad. Por el bien de nuestro sistema público de enseñanza, confío que esto se aclare.

¿Por qué piensa que Cifuentes ha anunciado una querella contra eldiario.es?

El portavoz del PP de Madrid nos amenazaba con que nos iba a denunciar porque estábamos cometiendo una ilegalidad al llamar a comparecer a la presidenta saltándonos el reglamento. Como hace Cifuentes, cuando no tienen argumentos para defenderse, atacan a los demás. Eso ha pasado con la querella. Es una huida hacia delante, un clásico del PP: responder con un ataque cuando están acorralados.

Sabiendo como sabe que los tiempos judiciales son lentos y que a ella le queda un año, para cuando se resuelva esta situación y se determine que no tiene razón, ella ya no será presidenta. Habrá conseguido salvar este año diciendo que todo está en manos de los tribunales. También es preocupante el uso que hace el PP de los tribunales. Todos los problemas los judicializa. Esto es un problema personal que se resuelve de una manera tan sencilla como acreditando que esta información no es verdad. Ella misma se ha metido en una trampa mortal. Le auguro un futuro negro.

En los próximos meses se dirimirán los candidatos para 2019, ¿quiere serlo?

Me encanta este trabajo. Estoy disfrutando de la portavocía y me encantaría ser candidata y en algún momento presidenta de la Comunidad de Madrid. Dicho esto, en lo que atañe a Podemos, lo interesante es que se reproduzca un sistema de primarias fiel a nuestros principios. Primero, construir una unidad popular, no podemos presentarnos como Podemos. No digo que Podemos esté o no en el nombre, pero no presentarnos como una figura única, como un partido en solitario. Lo digo yo y todo el mundo en Podemos. 

¿Hay divergencias sobre cómo construir esa candidatura?

Sí, ahí es donde creo que puede haberlas. Debemos huir de un pacto de despacho que se cierre entre Podemos, IU y Equo repartiendo cuatro puestos en una lista. A lo que debemos tender es a hacer un encuentro amplio en el que participen los movimientos sociales y la gente que trabaja por el cambio y hace política desde la base. Una cosa muy parecida a la que hizo Ahora Madrid en 2015, y que fue lo que motivó su éxito. Necesitamos un proceso de primarias muy democrático que garantice la proporcionalidad, como es un sistema Dowdall. Esto es lo que tiene que pasar. 

¿Se logrará esa candidatura de unidad popular que quiere?

Por lo que veo anunciar a los máximos dirigentes, me preocupa que no sea esta la dirección que se siga. Oigo mucho hablar de candidatos, de grandes llegadas a la Comunidad de Madrid. Es un gran error, es hacer política como la han hecho los viejos partidos. Somos una consecuencia del 15M y vinimos aquí a hacer las cosas de una manera diferente. Tenemos que ser muy democráticos en la interna también. 

Confío en que podamos hacer un proceso democrático también para la gente que está desmotivada y alejada de Podemos, y sería un error negarnos esto. Algunas de las prácticas que ha llevado a cabo Podemos han alejado a una parte del tejido crítico que se ha ido porque piensa que Podemos es un partido más. 

Se da por hecho que Íñigo Errejón será candidato. ¿Presentará una candidatura alternativa?

No puede haber confirmación oficial porque tenemos unos estatutos y tiene que haber unas primarias. Esas primarias pueden ser un puro trámite para designar a quien ha sido elegido a dedo desde arriba que permita que los ganadores arrasen y se lo lleven todo mientras el resto de personas quedan marginadas; o de verdad unas primarias democráticas donde quien quiera pueda participar y formar parte de una lista. Solo así conseguiremos ganar. Al PP y al PSOE. Nuestro objetivo tiene que ser el sorpasso al PSOE. 

Por ahora, mi esfuerzo y mi trabajo están puestos en esto. Llegado el momento, si hubiera distintas listas y la gente me lo pidiera, es una opción que no descarto. Por un lado están los deseos individuales de cada quien. Lo interesante es que garanticemos que Podemos es un partido en movimiento. Esto garantizará mi continuidad en este proceso. Estaré donde me pongan los inscritos e inscritas, mi gente y los votantes.