Quemar tu equipaje y vivir como si nadie te conociera: las oportunidades de la gran ciudad

Dicen que cuando llegas a una urbe como Madrid, atestada de gente, una de las experiencias que mejor se recuerda es la de encontrarte en un lugar en el que nadie conoce tu pasado, tus miedos, tus inseguridades. Todo a tu alrededor es desconocido y ninguna persona compartió contigo infancia ni puede albergar un recuerdo de tu niñez, de tu adolescencia, de lo que hiciste hasta el mes pasado. Partes de cero, y puedes convertirte en quien quieras ser. 

Las mochilas del pasado pueden quedar atrás en estos lugares, donde el anonimato es un aliado a la hora de construir tu futuro. Sabes el tipo de persona en la que te gustaría transformarte y a tu alrededor tienes todas las herramientas para hacerlo posible: en la capital de España, al igual que sucede en otras grandes ciudades como París, Londres o Nueva York, existen muchos sitios a los que acudir para cambiar tu imagen, conseguir la ropa que estás buscando o encontrarte con la gente interesante que te ofrecerá los mejores consejos para dar un giro a tu vida. 

Haciendo referencia a esa sensación de libertad propia de las grandes urbes, Seagram 's Gin, la ginebra inspirada en el espíritu neoyorkino, anima a todo el mundo a convertirse en la persona que realmente desee ser, dejando sus maletas a un lado y transformando su vida. El vídeo de la campaña, lanzado hace tan solo unos días, lo resume perfectamente:

La grabación transcurre en El Hotel, un lugar en el que no está permitido el equipaje y en el que sus clientes se pueden despojar de su antigua vida para empezar una nueva, gracias a la libertad que les proporciona la gran ciudad que es Nueva York. 

La marca espirituosa vuelve a su ciudad estadounidense de referencia y al concepto de hotel en el que suceden cosas extraordinarias. La frase final del vídeo, “Esto es Nueva York, y aquí nadie juzga a nadie”, define a la perfección la idea que Seagram´s quiere transmitir con esta campaña publicitaria, en la cual, podemos ver como todos sus personajes se van transformando en las personas que en realidad quieren ser y como se respetan los unos a los otros, sin importar su estilo, su forma de pensar, vestir o actuar. 

En definitiva, es una metáfora maravillosa de la vida real, en la que, cada persona le cuesta más o menos tiempo desprenderse de sus ataduras, para convertirse en esa persona que realmente le define, sin importarle ser juzgado por lo demás, ya que lo importante es que cada uno se sienta cómodo y libre consigo mismo.

Porque como bien dice el vídeo, no importa si quieres llamar la atención o pasar desapercibido, o llevar sombrero o bailar por la calle, al final lo único que importa es que tus actos te definan y te sientas tú mismo sin importar el qué dirán.