Todas las claves del Peugeot 2008 y de su versión 100% eléctrica, que llega en abril
La marca francesa Peugeot se dispone a entregar a principios de enero las primeras unidades del nuevo 2008, llamado a reeditar el éxito de un modelo líder entre los SUV del segmento B. Disponible desde 17.550 euros con motores de gasolina y diésel, a partir de abril estará a la venta también en una versión 100% eléctrica, denominada e-2008, cuyo precio arrancará en los 24.950 euros.
La primera sensación que transmite ahora el 2008, fabricado en la planta del Grupo PSA en Vigo, es la de ser más coche que antes, tanto que parece un 3008 a escala, merced a un crecimiento considerable en casi todas sus cotas: es 14 centímetros más largo y 3 cm más ancho, tiene una distancia entre ejes 6 cm más larga y su maletero aumenta en 12 litros, hasta los 434 litros.
Por el contrario, la altura se ha reducido 3 cm, lo que da al conjunto un aspecto más robusto en consonancia con otros rasgos de diseño muy marcados, entre ellos una parrilla elevada y un capó horizontal, ambos de claro estilo SUV, la línea de cintura creciente a lo largo de la carrocería y las grandes llantas de hasta 18 pulgadas. Los faros full led, según versiones, y el techo en color diferenciado son aspectos que aportan un toque de distinción a un vehículo que aspira a medirse en pie de igualdad con modelos considerados premium.
Como apuntábamos, hasta la llegada del e-2008, de momento el coche se ofrece con cinco motores de combustión interna. Los de gasolina son tres variantes del mismo grupo de tres cilindros y 1,2 litros que desarrollan 100, 130 y 155 caballos, y los diésel, dos versiones del propulsor de cuatro cilindros y 1,5 litros que entregan 100 y 130 caballos. Algunos de ellos incorporan una caja de cambios manual de seis velocidades y otros, un cambio automático de ocho marchas (EAT8) suplementado por levas en el volante.
En cuanto al modelo de baterías, monta un motor eléctrico de 136 CV y 260 Nm de par disponibles de inmediato, como es característico de este tipo de vehículos, junto a una batería de 50 kWh con la que puede recorrer 310 kilómetros, de acuerdo con el ciclo de pruebas WLTP. Su capacidad de regenerar energía puede regularla el conductor por medio de la palanca de cambios: en la posición D es la habitual en un coche de combustión y en la llamada B (por Brake, freno en inglés) la recuperación es mayor durante las desaceleraciones y frenadas.
Exteriormente, el e-2008 presenta elementos distintivos como la parrilla en el color de la carrocería, el león dicroico del frontal, cuyos reflejos alternan el azul y el verde según el ángulo desde el que se mire, y un logotipo específico e en las aletas delanteras y el portón trasero, así como una tapicería exclusiva en Alcántara de color gris para la versión más lujosa y deportiva (GT). Este modelo eléctrico dispone asimismo de información específica que se muestra tanto en el cuadro de instrumentos como en la pantalla central.
'Wallbox' incluido financiando la compra
La recarga completa de la batería requiere 17 horas si se utiliza el cable que se entrega de serie, de 3,2 kW de potencia, y entre 5,15 y 8 horas en un wallbox de 7,4 kW, que la marca regala al cliente en caso de que se acoja a su financiación. En una estación de carga rápida de 100 kW, el 80% de la energía se recupera en alrededor de 30 minutos.
Peugeot complementará la venta del e-2008 con la prestación de una serie de facilidades englobadas en los servicios Easy-Charge y Easy-Move. El primero proporciona al usuario diferentes soluciones de recarga tanto en su domicilio como en el trabajo, además del acceso a una red de recarga pública con más de 85.000 puntos en toda Europa. El segundo propone las rutas óptimas en función de la autonomía disponible y de las estaciones de carga presentes en el trayecto, junto con la posibilidad de alquilar un vehículo convencional, de gasolina o diésel, cuando se necesita realizar un viaje largo.
La gama 2008 al completo cuenta con la tercera generación del conocido Peugeot i-Cockpit, estrenada en el nuevo 208, que incluye ahora, además del acostumbrado volante de pequeño diámetro, una pantalla táctil de hasta 10 pulgadas y una innovadora instrumentación 3D que suministra al conductor indicaciones animadas de la información más relevante o urgente en cada momento, lo que reduce su tiempo de respuesta del orden de medio segundo, según la marca.
El nuevo SUV francés integra un selector de tres modos de conducción (Eco, Normal y Sport) y, a partir de septiembre del año entrante, podrá equipar el popular sistema Grip Control, que se encarga de optimizar la motricidad en condiciones de escaso agarre y trabaja en colaboración con el dispositivo de control de descensos.
De su catálogo de ayudas a la conducción merecen destacarse la frenada automática de emergencia que detecta peatones y ciclistas, tanto de día como de noche, entre 5 y 140 km/h, la alerta de cambio involuntario de carril (o invasión del arcén), cambio automático de luces cortas a largas, reconocimiento de señales, control de ángulo muerto, detector de fatiga y asistencia al aparcamiento. El regulador de velocidad adaptativo con función stop & go -combinado con el cambio EAT8- actúa solidariamente con la ayuda al mantenimiento del coche en el carril, asociado a su vez al sistema Lane Position Assist, que permite elegir la posición dentro del propio carril.
La gama del 2008 se compone de cuatro niveles de acabado (Active, Allure, GT Line y GT) y presenta una horquilla de precios que comprende desde los 17.550 euros de la versión de gasolina de 100 CV en acabado Active hasta los 27.400 euros de la de gasolina de 155 CV en acabado GT. Peugeot pretende repetir los sobresalientes registros de ventas del modelo precedente entregando durante 2020 más de 21.000 unidades de su nuevo SUV.
