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El primer Mustang nuevo en medio siglo será un SUV eléctrico con hasta 600 km de autonomía

Ford Mustang Mach-E, un SUV eléctrico de 600 kilómetros de autonomía.

Paula Ulloa

Aunque su producción estaba confirmada desde hace tiempo, no ha sido hasta estos días cuando se ha podido ver sin lonas ni camuflajes el aspecto del futuro Mustang Mach-E. El primer modelo nuevo de la marca en 55 años es un SUV eléctrico de lujo que estará a la venta a finales de 2020 y que señala tanto el comienzo de la era electrificada de Ford como la continuidad de los valores que inspiraron el deportivo más vendido del mundo.

El Mach-E estará disponible con baterías estándar (75,7 kWh) y de autonomía extendida (98,8 kWh) y con tracción total o trasera. Equipado con las segundas y tracción a las ruedas posteriores, alcanza una autonomía eléctrica de hasta 600 kilómetros, según el ciclo de pruebas WLTP. Esta misma versión en configuración 4x4 dispone de una potencia de 337 CV, pero el coche tendrá también una variante GT de 465 CV que podrá acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 5 segundos.

La dinámica de conducción podrá adaptarse al gusto del usuario por medio de tres programas (Whisper, Engage y Unbridled) que modifican la entrega de potencia, el comportamiento de la dirección, la iluminación interior y los sonidos artificiales que animan la respuesta de un vehículo que en principio es totalmente silencioso, mecánicamente hablando. Una serie de animaciones mostradas en el panel de instrumentos acompañarán igualmente el comportamiento de conducción de quien se siente al volante.

En las versiones de tracción total, el sistema Mach-E 4X aplica un par independiente a los ejes delantero y trasero para proporcionar una aceleración fulgurante y el buen manejo característico de cualquier modelo de tracción trasera. Los ingenieros y probadores de Ford han testado además su agarre en terrenos mojados y nevados. Más novedades tecnológicas disponibles en este modelo serán las pinzas de freno de aluminio que suministra Brembo y la suspensión adaptable MagneRide.

A simple vista, el Mach-E se reconoce instantáneamente como un Mustang debido a elementos distintivos de la marca del poni como el capó largo, los estilizados faros delanteros y las ópticas posteriores tribarra. Como buen eléctrico, dispone de un espacio de almacenamiento extra bajo el capó que alcanza los 100 litros de capacidad, suficientes para meter dentro un trolley. El maletero propiamente dicho cubica 402 litros, que con los asientos traseros plegados pasan a ser 1.420.

En el habitáculo debuta el sistema de comunicaciones y entretenimiento SYNC de última generación, que incorpora soluciones de inteligencia artificial para aprender las preferencias del conductor y mejorar con el paso del tiempo gracias a las actualizaciones vía satélite. Más llamativo visualmente que esto es la supertablet táctil de 15,5 pulgadas que se enseñorea del salpicadero y que, colocada en orientación vertical, recuerda de manera inevitable a las de algunos modelos de Tesla.

Entre los gadgets del nuevo Mustang merece mencionarse también la tecnología que, mediante Bluetooth, permite que el vehículo detecte los teléfonos inteligentes de los usuarios cuando se acercan y esté listo para iniciar la marcha sin necesidad de usar una llave o ni siquiera de sacar el móvil del bolsillo. Por si la batería se agota, es posible introducir un código de desbloqueo en un teclado situado en el pilar trasero, y otro código diferenciado en la pantalla central para arrancar el coche.

Para la operación de cargar el Mach-E, que un 80% de los propietarios de vehículos eléctricos realiza en su domicilio, Ford ofrece un wallbox que entrega hasta cinco veces más potencia que un enchufe doméstico convencional, de forma que pueden añadirse unos 51 kilómetros de autonomía por hora de carga, si se toma como referencia el modelo de autonomía extendida y tracción trasera. El cable de carga doméstico que se entrega de serie suministra alrededor de 35 kilómetros por hora enchufado a una toma de corriente al uso.

En un punto de carga rápida de 150 kWh, la misma versión recién aludida puede ganar hasta 93 kilómetros de autonomía con solo 10 minutos de carga. Se calcula que, en idéntica instalación, el Mach-E estándar recupera entre el 10% y el 80% de la capacidad de sus baterías en aproximadamente 38 minutos.

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