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El concejal de Urbanismo de Cieza admite que están estudiando política y económicamente el paseo ribereño

Paraje del río Segura a su paso por Cieza, a la que afectaría el proyecto de paseo ribereño / EEA

Belén Martínez

Cieza —

Francisco Saorín, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Cieza, ha informado a eldiario.esRegión de Murcia en qué situación se encuentra el polémico proyecto paseo ribereño. La nueva corporación municipal –formada por PSOE, Ganar-IU y Cieza Puede- se encuentra ante un convenio de 3,3 millones de euros firmado “cuatro días antes de las elecciones del 24-M y sin contar con la oposición”, ha remarcado Saorín.  

Con el plan se pretende construir un paseo peatonal de aproximadamente 3,4 kilometros a lo largo del río Segura, a su paso por el municipio de Cieza. En estos momentos el caso está en manos del “gabinete jurídico del ayuntamiento”. “Estamos estudiando el proyecto de forma política y económica”, confirma el concejal de Urbanismo por Izquierda Unida en Cieza.

Francisco Saorín señala que el Ayuntamiento se encuentra “manteniendo reuniones con Acuamed”. “Hemos podido conocer el proyecto gracias a ellos”, ha reconocido, para añadir que el proyecto “no está paralizado”. “No descarto que se realice”, afirma Saorín. El Gobierno municipal quiere tener todos los datos para tomar la “mejor decisión para los ciezanos”. “No queremos que sea un nuevo 'caso Capitol',–presupuestado en una cifra y que luego ha terminado costando mucho más”, ha remarcado el concejal.

Sobre las declaraciones de Fernando Tamayo, exconcejal de Obras y Servicios del Ayuntamiento de Cieza, en las que señalaba que lo normal es que primero se apruebe “la financiación para luego hacer el proyecto”, el actual concejal de Urbanismo respeta su opinión pero se muestra contundente: “Que eso sea una práctica habitual no quiere decir que esté bien; esa forma de actuar tiene que cambiar y va a cambiar con el nuevo Gobierno”.

El Concejal de Urbanismo remarca que “se han acabado las obras faraónicas y el gobernar a golpe de mayoría absoluta”. En opinión de Saorín, el momento de cambio político y de medidas de crecimiento social entendidas por la nueva corporación municipal abogan por pedir a la ciudadanía que se pronuncie si quiere ese proyecto u otras cosas.

Sobre la situación económica en la que está el municipio ciezano, de 35.000 habitantes, el concejal de Urbanismo asegura que de los 825.000 euros que debe poner el ayuntamiento en el proyecto de paseo ribereño, sólo se disponen de 300.000 euros, los presupuestados para 2014, pero el resto debe obtenerse mediante créditos.

A esa cuantía se debe sumar la multa de casi 5 millones de euros impuesta al Ayuntamiento de Cieza –la misma semana de las elecciones- por el caso Migaseca, donde se expropiaron unos terrenos de forma irregular. El concejal de Urbanismo ve con preocupación esta noticia y señala que aún no tienen estudiado cómo vamos se va a pagar esos casi 5 millones de euros. “¿Cómo vamos a poder hacer frente a otra cuantía?”, se ha preguntado. Así, ha admitido que el presupuesto municipal está tocado, y las promesas electorales de las tres formaciones en el Gobierno son muy ambiciosas. Si los números no salen, el paseo ribereño puede ‘cerrar sus puertas’ o sufrir grandes modificaciones.

El exalcalde Tamayo ya hizo algo parecido en 2007

Los contratos en el Ayuntamiento de Cieza a escasas horas de la cita electoral no son novedad en las legislaturas de Antonio Tamayo. El que fue alcalde del Partido Popular de Cieza desde el 2003 hasta este mes de mayo, convocó un Pleno municipal extraordinario unas pocas horas antes de comenzar la jornada de reflexión de los comicios de 2007, con el fin de sacar a delante el Plan General de Ordenación Municipal.

En ese momento, el alcalde y sus concejales decidieron convocar el Pleno el viernes 25 de mayo de 2007 a las 18:00 horas, poco antes de que comenzara la jornada de reflexión de las elecciones municipales y autonómicas de 2007, fijadas el domingo 27 de mayo.

El Pleno tenía como único punto del orden del día la aprobación del Plan General de Ordenación Municipal, con el que se pretendía recalificar aproximadamente 22 millones de metros cuadrados de terreno para construir 11.000 viviendas y 6 campos de golf.

Esta urbanización contaba con el informe desfavorable del jefe de Área de Urbanismo municipal y el documento de Evaluación Estratégica, a lo que había que añadir el convenio firmado, meses antes, entre el Ayuntamiento de Cieza y la Conferencia Hidrográfica del Segura para poder abastecer a esta urbanización. El agua tenía que provenir de la desaladora de Escombreras.

Gracias a la mayoría absoluta que ostentaba el Partido Popular en el municipio ciezano por esas fechas -13 concejales del PP por 7 concejales del PSOE y uno de IU-, el alcalde Tamayo pudo sin problema aprobar el plan, siendo en ese momento un Gobierno en funciones. Las urnas revalidaron después la mayoría absoluta del PP por cuatro años más.

Tras la aprobación del Plan de Ordenación Municipal en el Pleno, el documento sufrió importantes modificaciones; entre ellas, la reducción de un 60% de los terrenos de los que se hablaba en el plan. Por otra parte, las empresas promotoras debían hacer frente a unas multas con cuantías muy elevadas, pero finalmente se les eximió de pagar dichas sanciones por el cumplimiento de los convenios. A día de hoy, en la zona que fue recalificaba en ese Pleno municipal no se ha desarrollado ninguna vivienda ni los campos de golf prometidos.

Es necesario recordar que en ese momento, mayo de 2007, el fiscal jefe de Murcia, Manuel López Bernal, imputó a Tamayo, al que investigaba por falsedad documental y prevaricación en un caso que recibió el nombre de 'Golf Benís', al incluir unos planos modificados en el convenio firmado con la empresa Cieza Golf para la construcción de una urbanización. Esta acción tenía como finalidad –según las investigaciones- beneficiar a un número reducido de personas.

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