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El comedor social París 365 abrirá un segundo local durante los Sanfermines

Una vista de la calle Mayor, en el Casco Viejo de Pamplona.

Garikoitz Montañés

Pamplona —

La ONG París 365 contará durante las próximos Sanfermines con dos locales hosteleros, el doble de opciones para que quienes disfruten de la fiesta puedan hacerlo con el añadido de contribuir a una causa social comprando sus copas o sus bocadillos en los locales de hostelería de este colectivo. Al comedor social habitual, situado en la calle San Lorenzo (conocido como La Cepa), se suma este año otro situado en la misma vía del Casco Viejo de Pamplona. No se trata tanto de una ampliación como de una fase de transición: la entidad había adecuado el local en alquiler en La Cepa pero ese contrato se termina y, ahora, hará la mudanza para trasladarse definitivamente a Lanzale. Durante las próximas fiestas, las puertas de los dos negocios estarán abiertas, pero el objetivo es advertir a los asistentes ya del cambio definitivo.

Para París 365, este no es un proceso nuevo. No en vano, la Organización No Gubernamental y fundación debe su nombre a su apertura, en junio de 2009, en el bar París (conocido por aquello de la París-Niza del Casco) de la calle Jarauta y, apenas un año después, el local se quedó pequeño y tuvieron que trasladarse a su ubicación actual. Entonces, el objetivo de un grupo de diez amigos era atender las necesidades que, entre la crisis y una situación desfavorecida, podían tener las personas con problemas de alimentarse o, incluso, de ser escuchadas, porque “la precariedad económica también puede llevar al aislamiento social”, cuenta Eliana Alemán, una de las integrantes de la ONG. Así, París 365 les ofrece un lugar al que acudir durante todo el año. Y lo que surgió como un comedor social se ha convertido en una larga cadena de proyectos, siempre atendiendo un tema concreto: una oficina jurídica para inmigrantes, un espacio para evitar el aislamiento social, una biblioteca y sala de ordenadores, un proyecto para repartir sopa caliente en la calle, otro de cesta básica para familias, una empresa de catering…

“Creceremos en la medida en que crezcan las necesidades detectadas. Ahora hay mucho por hacer, y por eso seguimos adelante”, explica Alemán. Ella, como coordinadora de proyectos, menciona de carrerilla el listado, que ha convertido a París 365 en un referente del movimiento social navarro. No en vano, previo paso por la oficina de El Txoko situada en la calle San Lorenzo, los usuarios pueden después acudir al comedor social. En total, en 2013 por ejemplo se ofrecieron unas 29.000 comidas y cenas. Y, desde su creación, la entidad ya supera las 134.000.

Cerca de 300 voluntarios en fiestas

San Fermín es otra de las actividades de este colectivo, especializado en la hostelería y que se beneficia de este modelo para ayudar a quienes lo necesitan. En fiestas, los locales no son muy diferentes a los de una peña sanferminera, con su música, sus copas, sus bocadillos y su público festivo de todo tipo. Pero, en 2013 por ejemplo, quienes estaban detrás de la barra fueron unos 285 voluntarios (París 365 cuenta con unos 800, alrededor de 380 de ellos de forma más permanente) que quisieron contribuir a esta causa solidaria.

La organización de las fiestas de 2014 ya está sobre la mesa. Y, esta vez, con el reto doble de atender a los asistentes en el local actual y en el nuevo de Lanzale. Este es el primer paso de un cambio que será definitivo. Mientras el comedor social se quedará en Lanzale, las oficinas de voluntariado, apoyo psicológico y aula para actividades infantiles seguirán en la calle Mayor, en un local que fue uno de las últimas incorporaciones de la entidad. Con estos dos puntos a los que acudir y su larga red de proyectos, París 365 se consolida como un referente social en pleno Casco Viejo pamplonés.

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