“Percibimos dos céntimos por una canción que nos cuesta 2.000 euros”
Mikan nació en Barcelona y actualmente reside en Santander. Con un estilo musical electro-pop, comenzó su andadura en este mundo en 2013 y en 2015 lanzó su primer EP llamado 'Señas de Identidad', con una versión de 'Ouragan' de Stèphanie de Mónaco. En mayo de este año presentó su nuevo álbum 'Luces y Sombras' y cuenta con dos trabajos preseleccionados para representar a España en Eurovisión.
En el evento de presentación del disco ‘Luces y Sombras’ fue amadrinado por Alaska, ¿qué supone este hecho? ¿Qué sintió?
Muchísima emoción. Alaska es amiga desde hace muchos años y le pedimos colaboración para hacer la presentación del show, la primera que hicimos en la Sala Shoko de Madrid. Accedió muy amable, a nosotros nos hizo mucha ilusión y estamos siempre agradecidos por ello.
En su discurso Alaska reconoció la dificultad de llegar a un escenario con géneros como el suyo por el poco apoyo que se les da, ¿Por parte de quién echa en falta ese apoyo?
Por parte de la industria musical en general. Es muy complicado que te apoye tanto la prensa como cualquier otro si no tienes una discográfica detrás; la necesitas porque con un autoproducido hoy en día es muy difícil llegar a tienda. Parece una tontería pero necesitas tener un contrato discográfico para poder distribuir ese disco.
La piratería juega un papel importante en este caso, ¿Influye directamente?
Eso influye siempre. No a mi nivel porque yo estoy prácticamente empezando como quien dice, llevo cuatro años pero prácticamente acabo de empezar de manera profesional, pero sí que lo hace el tema del streaming. Las ventas digitales ahora han variado, por ejemplo en Itunes, no se vende como antes que te pagaban casi la totalidad de la venta del disco. Ahora percibimos un 0,02 por canción vendida, es decir, 2 céntimos cuando una canción cuesta casi 2.000 euros hacerla.
¿Programas como Spotify ayudan a paliar la piratería?
Para nada, ahora la SGAE ha ganado una batalla que tenía entre manos con el tema de las licencias que se hacían por ventas de discos y por ahí vamos a intentar conseguir algo más. Piensa que el streaming no nos aporta nada, necesitas como dos millones de reproducciones por cada canción para recibir… ¿un euro?, es irrisorio. A nivel promocional puede servir como plataforma pero de ello no puedes vivir en absoluto.
¿Qué proyectos tiene para el futuro?
Estamos preseleccionados para Eurovisión. Hemos presentado dos canciones, una de manera directa con TVE y la otra por vía web como se suele hacer. Por otro lado, también estamos buscando discográfica y tenemos ganas de empezar ya el verano con los bolos.
¿Qué expectativas tiene para Eurovisión?
Si te fijas todos estos años han ido chicas con grandes voces y no ha habido mucha repercusión a nivel nacional porque estamos enviando gente que a Europa no le gusta. A Europa le gusta el espectáculo, no una gran voz. Tenemos que gustar a Europa no a España. Nosotros vamos a hacer algo que guste a Europa y lo hemos enfocado por ahí, es decir, hacer una buena interpretación, un espectáculo muy visual.
