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Ciudadanos duda sobre si propiciar el cambio en Santander mientras aboga por “aire fresco” para el Gobierno de Cantabria

Félix Alvarez, líder de Ciudadanos en Cantabria.

Rubén Alonso

El escenario político que arroja el resultado de las elecciones autonómicas y municipales ha dejado al descubierto las contradicciones de Ciudadanos. El partido que se dice regenerador de la política y que propició un cambio en Andalucía de la mano de la extrema derecha, ve claro aplicar esta teoría en algunos casos mientras que en otros lo deja en el aire manteniendo la duda sobre su posición política.

Y es que en Cantabria, donde, tras un escrutinio que en un primer momento le abrió la puerta a sumar con el PRC en el Parlamento autonómico, le instó a Miguel Ángel Revilla a que dejase a un lado al PSOE, partido que había sido su socio de gobierno en la pasada legislatura, para dar entrada a “aire fresco” en el Gobierno.

Félix Álvarez, el candidato naranja, se postuló así como nuevo socio regionalista frente a un PSOE “que no es de fiar” y un PP “a la baja”. Sin embargo, este afán por “regenerar, modernizar y renovar” no termina de aplicarlo en Santander, donde sus dos concejales tienen la llave del cambio tras 40 años del PP en el poder.

Y es que el edil Javier Ceruti supedita la decisión final sobre si servir de muleta a la alcaldesa en funciones, Gema Igual, con el apoyo de Vox o facilitar un gobierno alternativo con PSOE y PRC en la capital a las indicaciones que lleguen desde Madrid. La falta de autonomía del partido a nivel municipal dejará la postura de los dos concejales naranjas en manos de la partida de pactos que se juegue a nivel nacional entre los distintos territorios.

Antes y durante la campaña, el candidato de Ciudadanos de Santander ha sido muy crítico con la gestión del PP y sus principales escándalos como el MetroTus o las escolleras de la Magdalena, hecho que el socialista Pedro Casares le recordó nada más conocerse los resultados este domingo, pidiéndole que “cumpla con su palabra de campaña” y que haga posible “el anhelado cambio”.

Así todo, la posibilidad de un cambio de cromos entre Santander y Cantabria, con el voto naranja a favor del cambio en la capital y con la entrada de 'Felisuco' en el Gobierno de Revilla, se ha cerrado este jueves tras el escrutinio final de los votos. Después de que en la madrugada del lunes el PRC sumara su diputado 15 por la mínima en detrimento del séptimo del PSOE, Ciudadanos entró en escena como alternativa para los regionalistas para conformar gobierno, alcanzando entre ambos la mayoría necesaria de 18 diputados.

Sin embargo, faltaba por recontar el voto del extranjero (CERA) que se llevó a cabo este miércoles y que, por la escasa diferencia entre los de Revilla y los de Zuloaga por ese diputado que cayó del lado regionalista en el último momento, el panorama podía volver a cambiar dejando fuera a Ciudadanos de la suma para la mayoría parlamentaria.

A mediodía del miércoles, tras el recuento, el PRC mantenía su diputado 15 y Álvarez envío un comunicado ofreciéndose como socio de gobierno. No obstante, una retahíla de errores en el recuento de votos volvió a poner en duda el resultado final de las elecciones, desencadenando horas de caos y confusión en la Junta Electoral.

Finalmente, tras suspender el escrutinio anoche, se ha retomado este jueves y el resultado final ha devuelto al PSOE su séptimo diputado, dejando a Revilla con 14 y a Ciudadanos sin posibilidad de entrar en el Gobierno.

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