Cantabria, séptima comunidad con mayor aportación a la proyección exterior de España, según Elcano

Madrid, Cataluña y Andalucía son las tres comunidades autónomas que más contribuyen a la proyección exterior de España, en línea con su aportación al Producto Interior Bruto (PIB) del país, según el último informe del Real Instituto Elcano sobre presencia global, relativo al año 2016, que también destaca la aportación de Cantabria, la séptima mayor por autonomías.

El estudio, presentado este lunes por los investigadores Iliana Olivié y Manuel Gracia, concluye que España mantiene el puesto número 12 en el ránking de cien países para los que se calcula el índice Elcano de Presencia Global, que valora en qué medida cada uno de ellos se proyecta hacia el exterior.

Este índice se calcula teniendo en cuenta tres variables: la económica, la militar y la denominada blanda --en la que se incluyen factores como el turismo, la ciencia, la cultura o la cooperación internacional al desarrollo--.

El informe refleja además la existencia de algunas comunidades con un perfil “extravertido”, como Cantabria, que ocupa el lugar 16 en cuanto a su aportación al PIB pero en cambio está en el puesto número 7 en su aportación a la presencia global. Esto es debido a la acción exterior del Banco Santander. En cambio, hay comunidades intravertidas, como Castilla-La Mancha (9ª en el PIB, 13ª en presencia global), Castilla y León, la Comunidad Valenciana o Andalucía.

Por distribución geográfica, Madrid, Cataluña y Andalucía lideran la presencia global de España, demostrando una “fuerte relación” con su contribución al PIB agregado del país. Estas tres autonomías suman el 58,8 por ciento de la presencia global de España.

En el caso de la Comunidad de Madrid, su aportación se ha visto afectada por las consecuencias de la crisis económicas, ya que es sede fiscal de la mayoría de empresas del país, que han reducido sus inversiones. Debido a este “efecto sede”, como lo ha denominado Olivié, Madrid ha pasado de un valor de 34,8 de presencia global en 2010 al 29,1 en 2016. Pese a ello, sigue en el primer puesto por comunidades.

Cataluña por su parte tiene un índice de presencia global (19,6 en 2016) similar a su aportación al PIB (19,0) y se ha mantenido estable durante los últimos diez años. Si Madrid es la comunidad que más aporta en las dimensiones económica y militar, Cataluña es la autonomía que más participa en la denominada dimensión blanda. En concreto, ocupa el primer lugar en variables como migraciones, turismo, ciencia, deportes e información.

Los investigadores del informe constatan que las tensiones territoriales internas de España se encuentran “en uno de sus niveles más altos de la historia reciente”, pero no creen que afecten a la proyección de España a corto plazo porque sus variables “suelen requerir cierto tiempo” para reflejar las consecuencias de los cambios políticos o económicos.

Por ejemplo, los efectos de la crisis económica no se reflejaron en estos informes hasta los años 2010 y 2011. Sí puede influir por ejemplo en la variable de la información, que mide el volumen de noticias sobre España en el exterior sin tener en cuenta si tienen un impacto positivo o negativo.

Además, destacan comunidades cuya contribución a la presencia global de España es muy elevada en indicadores concretos, como es el caso de Baleares y Canarias con el turismo; Andalucía y la Comunidad Valenciana en bienes primarias o Murcia en energía. Por su parte, la Comunidad de Madrid realiza las mayores aportaciones en servicios, inversiones, equipamiento militar, tropas desplegadas, cultura, tecnología, educación y cooperación al desarrollo.

El índice también permite analizar la distribución regional de la presencia global de España, que se proyecta fundamentalmente hacia Europa (61,1 por ciento de la presencia total en 2016), siendo muy menores las proporciones de presencia en América Latina (13,6%), Norteamérica (8,4%), Magreb y Oriente Medio (7,2%), Asia-Pacífico (7%) y África Sub-Sahariana (2,7%).

El destinatario principal de la proyección exterior de España es Reino Unido (13,5%), donde de hecho la presencia global presenta valores similares a los de toda América Latina. Le siguen Francia (7,5%), Estados Unidos (7,3%), Alemania (7,1%), Italia (4,1%), Turquía (4%) y Portugal (3,7%).

Además, la desagregación por variables también muestra la importancia de Europa como primer destino de presencia en muchas de ellas. Esto es así en todas las variables económicas, en el equipamiento militar y en todas las variables blandas con excepción de los deportes y ayuda al desarrollo.

CAÍDA DE LA COOPERACIÓN AL DESARROLLO

En valores concretos, la contribución de la variable de turismo que explicaba un 7,8% de la presencia global de España en 1990, se sitúa en 2016 en el 5%, subiendo 1,7 puntos porcentuales desde 2010. Sin embargo, la cooperación al desarrollo parte de un 1,8% de la presencia global de España en 1990 para situarse en un 3,9% en 2010 y caer al 1,2% en 2016; un nivel similar al de los años 80, cuando el país dejaba de ser receptor de ayuda oficial al desarrollo.

El estudio refleja que, no obstante, el comportamiento de otras variables reflejaría que ciertos cambios estructurales en la naturaleza de la proyección exterior del país no se han visto revertidos con los años de crisis. Por ejemplo, la ciencia, que suponía el 2,3% de la presencia total en 1990 aumenta hasta el 4,1% en 2010 y, de nuevo, hasta el 5,9% en 2016. Lo mismo ocurre con la cultura: del 3,3% en 1990 al 4,6% en 2010 y al 6,0% en 2016.