Euskadi da prioridad por ley a la custodia compartida
Tres años después de iniciar su tramitación y entre los aplausos de las asociaciones de padres y madres separados que presenciaban el debate, el Parlamento vasco ha aprobado la Ley de Custodia Compartida que establece que los jueces deben estudiar esta medida en el caso de que uno de los progenitores la solicite. Este punto es el que ha dividido a los partidos representados en la Cámara vasca.
Mientras el PNV, PP y UPyD han votado a favor de su aprobación, al considerar que la ley es un “avance hacia la corresponsablidad” y que da una solución “una problemática pendiente en la sociedad”, EH Bildu y PSE han mostrado su oposición ante la nueva norma ya que consideran que es “generalista” y “no garantiza el bienestar de hijas e hijos”.
Por parte del PNV, Amaia Arregi, ha remarcado que la nueva ley es una “garantía del bienestar de hijas e hijos” ya que promueve la “corresponsabilidad” de ambos progenitores, impulsa la mediación familiar, y flexibiliza el uso de la vivienda -la ley establece que el juez otorgará el uso de la vivienda al progenitor a quien corresponda la guarda y custodia, pero podrá atribuir el uso del inmueble a aquel progenitor que, aunque no tuviera la guarda y custodia de los hijos, tuviera mayores dificultades de acceso a otra vivienda-.
En esta línea, la portavoz popular, Laura Garrido, ha destacado que con la aprobación de la ley “ambos progenitores tienen derecho a tener una relación con sus hijos en un plano de igualdad”. Garrido ha insistido en que la norma además de ser “garantista y proteger al menor”, es la opción que “más avanza en la corresponsabilidad” y “da respuesta a una demanda social” -en alusión a las 85.000 firmas que apoyaron la Iniciativa Legislativa Popular-.
Igual de entusiasta se ha mostrado el representante de UPyD, Gorka Maneiro, que ha defendido que “la custodia compartida es la mejor opción para los menores”. Maneiro ha criticado los votos en contra de EH Bildu y PSE, porque considera que defienden “discurso anclado en el pasado y alejado de la realidad”.
Votos en contra
En el lado contrario se han situado EH Bildu y el PSE que se han mostrado claramente en contra de la ley. Para la coalición soberanista la nueva norma “sigue anteponiendo el interés de los progenitores al de los menores”. En este sentido, su portavoz Diana Urrea, ha aclarado que su formación apuesta por “soluciones individualizadas en cada caso”, porque “la igualdad no vendrá por que se imponga un tipo de guarda y custodia”, ha criticado.
En los mismos términos se ha expresado la portavoz socialista Miren Gallastegui, que ha definido el documento aprobado como “una mala ley”. Gallastegui ha justificado su postura porque “va a provocar más problemas que soluciones”. Así mismo ha defendido “que se hagan trajes a medida” en cada uno de los casos “que abriguen los derechos de los menores”, bien sea con custodias compartidas u otorgadas sólo a uno de los progenitores.
