Garitano premia al Egin, donde fue redactor jefe

La Diputación de Gipuzkoa entregará la Medalla de Oro de este año al artista Néstor Basterretxea, por su “compromiso y solidaridad”, y dos Placas de Oro a los diarios Egin, del que fue redactor jefe el diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano, y Euskaldunon Egunkaria. El acto de entrega de estas distinciones se celebrará en el Palacio foral, en San Sebastián, el 12 de septiembre.

Preguntado sobre el hecho de que pueda haber críticas a la concesión de la Placa de Oro a un medio en el que ha trabajado el diputado general, Garitano ha indicado que “Egin no tiene la culpa de que trabajara en él” y ha apuntado que no ha sido a propuesta suya y, además, “la sociedad guipuzcoana lo va a entender perfectamente”.

La oposición salió rápidamente a censurar esta decisión. El PSE-EE consideró que “son distinciones de parte” y el PP opinó que utilizar la Diputación “para premiar a sus amiguetes”.

En una rueda de prensa en San Sebastián, el diputado general de Gipuzkoa, Martin Garitano, ha informado de que el consejo de Gobierno foral ha decidido conceder “la máxima distinción” que otorga la Diputación guipuzcoana a Basterretxea (Bermeo, 1924), afincado en Gipuzkoa y “uno de los máximos exponentes del arte vasco del siglo XX”.

Garitano ha destacado que este artista ha trabajado, desde sus inicios en la pintura en la década de 1940, muchos ámbitos que pasan desde la escultura, por el diseño, la arquitectura y el urbanismo, la fotografía, y la escritura, lo cual muestra que “es un artista integral, que trasciende los estrechos límites de las disciplinas artísticas”.

Además, ha recordado que “de niño, conoció la guerra civil española y el consiguiente exilio” y colaboró “intensamente” con otros artistas vascos como Jorge Oteiza o Eduardo Chillida. Junto a ello ha subrayado que Basterretxea “ha sido siempre una persona comprometida con su pueblo, y ha participado en innumerables iniciativas sociales y culturales, como son la creación de la Filmoteca Vasca” y también ha subrayado su dedicación a la acción humanitaria, “que le ha llevado a la guerra de Bosnia o al Sahara”.

“La sociedad guipuzcoana quiere mostrar su reconocimiento y gratitud a Basterretxea, mediante la concesión de la distinción de la Medalla de Oro de Gipuzkoa, por su compromiso y solidaridad, y por ayudar a difundir una imagen excelente de Gipuzkoa”, ha incidido. En los últimos años la Medalla de Oro de Gipuzkoa ha sido concedida al misionero Anjel Olaran, a las andereños pioneras del movimiento de las ikastolas, y a Mikel Laboa.

Por otro lado, el diputado general ha anunciado que este año el Consejo de Gobierno Foral ha acordado conceder este dos placas de oro de Gipuzkoa, “dentro del protocolo”, la primera de ellas al diario Egin, del que fue redactor jefe.

Garitano ha recordado que la ideología de este periódico, creado en 1977 “al calor del renacimiento post-franquista”, se situaba “en la interpretación de la nación vasca desde una perspectiva de izquierdas, con un amplio espectro” y durante 21 años estuvo presente “en las movidas aguas de la política vasca, teniendo que hacer frente a tempestades, hasta que fuera víctima, ahora hace 15 años, en julio de 1998, de la agresión del Gobierno derechista español”, en alusión a su clausura por orden del juez de la Audiencia Nacional (AN) Baltasar Garzón.

“El ataque contra Egin y Egin Irratia fue, a juicio de muchas mujeres y hombres de diferentes partidos y que siguen siendo hoy ejemplo de la sociedad vasca, una de las agresiones más brutales contra la libertad de expresión”, ha defendido, para añadir que, por ello, la sociedad guipuzcoana desea ahora “mostrar su reconocimiento y gratitud” a este diario.

También recibirá idéntico reconocimiento el periódico Euskaldunon Egunkaria, creado en diciembre de 1990 y clausurado por orden judicial en 2003, y que Garitano ha calificado de “icono del periodismo moderno y de calidad en euskera”.

“Euskaldunon Egunkaria ejerció un periodismo basado en su independencia”, ha subrayado, al tiempo que ha afirmado que “en la historia de Euskal Herria del siglo XX, pocos fueron los proyectos capaces de unir a vascoparlantes de toda condición e ideología en un solo proyecto, tal y como ocurrió en la fundación” de este periódico.