Menor de 15 años, de madre sin pareja y sin cualificación, perseguido por la pobreza
El Departamento de Empleo y Políticas Sociales ha cruzado los datos recogidos por diferentes entidades públicas y privadas sobre la realidad de la infancia y la adolescencia. Tras su análisis, el Ejecutivo de Íñigo Urkullu ofrece un diagnóstico que no difiere del avanzado por otros estamentos: el colectivo infantil es uno de los más golpeados por la crisis, también en Euskadi.
Mientras el porcentaje de la población vasca que vive en riesgo de no poder cubrir sus necesidades básicas se sitúa en el 7,3%, cuando se hace referencia a niños y niñas menores de 15 años esta proporción se eleva al 11,7%. Traducido en cifras, son 35.000 niños y niñas menores de 15 años los que residen en hogares en riesgo de no poder cubrir sus necesidades básicas de alimentación y vivienda. Lejos de reducirse, el porcentaje se incrementa año a año desde el 2008. El Gobierno no está en disposición de ofrecer números actualizados sobre esta realidad- los registrados en 2014- pero tras examinar los estudios sobre pobreza más recientes subraya el mayor riesgo de pobreza que sufre la población que forma parte de hogares donde vive algún menor de 14 años. Además cuantos más menores residen en el hogar, mayor es el riesgo.
El informe sobre la “Realidad de la infancia y la adolescencia vasca” destaca que el peligro de caer en situaciones de pobreza afecta especialmente a las familias encabezadas por una mujer, generalmente inmigrante, menor de 35 años y sin cualificación laboral, una advertencia que ya apuntó Save The Children y Cruz Roja, Unicef y Cáritas corroboraron en su diagnóstico sobre la situación general de la infancia y adolescencia en España, extrapolable en mayor o menor medida a cada comunidad.
Las prestaciones llegaron a la mayoría de los menores afectados
La pobreza de mantenimiento real, es decir, la referida a un hogar en el que además de tener ingresos insuficientes para hacer frente a gastos de alimentación, vivienda, vestido o calzado, carecen de otros bienes para compensar esa situación, también refleja un incremento en su evolución. Desde 2008 a 2012 ha pasado de un 7,4% a un 9,5%.
El Departamento de Empleo y Políticas Sociales considera que el sistema de protección vasco favorece la contención de las tasas de pobreza en la comunidad vasca, “evitando que alcancen las cotas a nivel estatal o europeo”, pero es cauteloso en sus afirmaciones. Declaran que “parece que la consolidación de este sistema podría mitigar parte de las consecuencias de la actual crisis”.
A falta de datos actualizados en relación a las prestaciones concedidas en 2014 y 2013, en su informe se retrotraen al año 2012 para realizar el análisis. La conclusión es que la Renta de Garantía de Ingresos- RGI- durante ese periodo no llegó a toda la población infantil en situación de pobreza, aunque la mayoría de los niños y niñas que padecen pobreza real sí la recibieron. Casi 24.370 menores de 16 años fueron perceptoras de dicha prestación, casi el 8% de niños de esa edad mientras que entonces se situaba en un 9,5% el porcentaje de población de menor de 15 años en situación de pobreza de mantenimiento real.
