Gobierno vasco cree que se está ante “un hito” y confía en que el Gobierno central abra una “fase de negociación”

El portavoz del Gobierno vasco y consejero de Administración Pública y Justicia, Josu Erkoreka, ha considerado que el 'proceso participativo' de este 9 de noviembre en Cataluña constituye un “hito” y ha confiado en que “sea posible abrir una nueva fase de negociación en la que se pueda acordar una fórmula más profunda y efectiva de participación de la sociedad”.

En declaraciones previas a su participación en el XII Congreso Internacional de Infancia Maltratada, que se celebra en Bilbao, Erekoreka ha pedido, además, al Gobierno central “una respuesta política a una demanda política” y ha lamentado la “actitud de cerrazón que se ha mantenido hasta el momento”.

Asimismo, ha considerado “inapropiado” que, desde el Ejecutivo, se intente aplicar “mecanismos jurídicos” para dar solución a aquellos problemas que son “de naturaleza política”.

Según ha incidido Erkoreka, el 'proceso participativo' de este 9 de noviembre en Cataluña va a constituir “un hito” que marcará “un antes y un después” y ha mostrado su confianza en que, a partir de esta fecha, “sea posible abrir una nueva fase de negociación en la que pueda acordarse una fórmula más profunda y efectiva de participación de la sociedad”.

“Va a ser una referencia importante porque vamos a vivir un proceso de participación inédito, pero además esperamos que marque el inicio de una fase negociadora que pueda desembocar, antes o después, en un proceso participativo mucho más profundo y con todos los elementos de una consulta pública, de manera que esta aspiración de la sociedad catalana de votar para decidir su futuro sea una realidad efectiva y pactada”, ha añadido.

SITUACIÓN, A FUTURO

Tras reconocer que es “un deseo del Gobierno vasco” el que esta situación se pueda dar en el futuro, ha manifestado que es algo que puede ocurrir si por parte del Gobierno central se cambia la “actitud de cerrazón que se ha mantenido hasta el momento”.

“Hemos denunciado en repetidas ocasiones esta actitud cerril, de invocaciones rituales al ordenamiento jurídico que no tienen recorrido, cuando de lo que se trata es de dar respuesta a un problema político y a una demanda mayoritaria de la sociedad catalana”, ha señalado.

A su juicio, invocar la ley con “insistencia” cuando de lo que se trata es de dar respuestas políticas es un planteamiento “erróneo y equivocado”. “Antes o después el Gobierno debe darse cuenta de que ese camino no le lleva a ninguna parte y está dando una respuesta inadecuada para solucionar el problema”, ha añadido.

Asimismo, ha indicado que de acceder el Gobierno central a ofrecer “una respuesta política a una demanda política” como la catalana, el hecho podría “servir de precedente” para afrontar otros problemas de naturaleza política a los que, hasta el momento, el Ejecutivo solo da respuesta “desde mecanismos jurídicos, que son inapropiados para problemas de naturaleza política”.