Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Luces y sombras para la cultura en 2014 (II)

'La Risa de Bilbao' ofrece una charla de los guionistas de 'Ocho apellidos vascos' y otra sobre bertsolarismo y humor

Patricia Burgo Muñoz

Continúa de Luces y sombras para la cultura en 2014 (I)Luces y sombras para la cultura en 2014 (I)

2014 también ha sido un año de luces para la cultura en Euskadi. Los recortes siguen lastrando a un sector acostumbrado a subsistir pero que de vez en cuando encuentra un destello. Este año el espaldarazo lo ha dado el fenómeno ‘Ocho apellidos vascos’ que llenó salas de cine semana tras semana y recaudó más de 42 millones de euros, lo que le ha convertido en la película española más taquillera de la historia.

El efecto ‘Ocho apellidos’ no solo ha llevado al cine a gente de todas las edades, algunos llevaban años sin pisar la moqueta del cine, también ha supuesto un empujón al reconocimiento de las producciones españolas. Así lo afirmaba el guionista de la cinta, Borja Cobeaga, en una entrevista a eldiarionorte.es. “Hay que convencer a la gente del que el cine español está bien estrenando películas que estén bien, no solo con discursos”, apuntaba a la vez que defendía el humor como  “una de las herramientas para destensar el problema vasco”. Algo que sin duda consiguió con el alocado romance entre una vasca y un andaluz.

Cuando todavía se oían las carcajadas de la comedia del año, en San Sebastián se celebró un Zinemaldia que de nuevo lleno de flashes la ciudad. Premio Donostia para Denzel Washington y Benicio del Toro y una alfombra roja por la que desfilaron Antonio Banderas, John Malkovich, el director Carlos Vermut, que se llevó la Concha de Oro por ‘Magical Girl’, y el recuerdo, en forma de documental, de la visita hace 25 años de la gran Bette Davis, en la que fue su última aparición pública antes de su muerte.

La música trajo como cada año el jazz de verano. Bobby McFerrin, Chick Corea, Ray Davies, Delorean por Donostia; Noa, Miguel Poveda, Chucho Valdés y el mismísimo Paul Anka por Vitoria.

Y para los amantes de los decibelios, una nuevas edición del Azkena Rock festival con Scorpions y Blondie y el flamante y poblado BBK live, que reunió a 120.000 personas y deslumbró con Franz Ferdinand y, sobre todo, con The Black Keys.

Salto de los decibelios a las pantallas, en este caso de televisión. El FesTVal se consolida y ha conseguido por quinto año consecutivo mezclar los gritos adolescentes ante el glamour y la gomina de las grandes series populares con un cartel paralelo cada vez más interesante para el sector audiovisual y en el que se encuentran los profesionales de un medio tan denostado como necesario para impulsar la cultura.

Y entre los festivales sin alfombra roja, los mejores para muchas personas, ha habido de todo. El encuentro con el cine de terror de San Sebastián ha cumplido un cuarto de siglo. 25 años que asustan, pero por lo bueno y por conseguir en tiempos de recortes mantener una cita lejos de los focos.

Hay mil ‘pequeñas’ cosas más, como el galardón obtenido por Antonio Altarriba en Francia por su recién estrenado cómic ‘Yo, asesino’, o el máximo reconocimiento de las artes escénicas, el Premio Velázquez, concedido a la donostiarra Esther Ferrer, pero es imposible abarcar todo.

Tres despedidas y muchos recuerdos

La parte más dramática ha sido la despedida de tres figuras de como Néstor Baterretxea, Ramiro Pinilla y el conocido Álex Angulo, pero también ha habido recuerdos para el gran Miguel de Unamuno en su 150 aniversario, o para el cantante Imanol, 10 años despúes de su muerte.

El polifacético creador Néstor Basterretxea dijo adiós la madrugada del 12 de julio a los 90 años, dejando atrás una obra heterogénea que incluye escultura, pintura, cine y diseño gráfico. Basterretxea fue uno de los principales referentes de la cultura vasca de la segunda mitad del siglo XX y será recordado por estar entre los fundadores de dos importantes grupos artísticos: en 1957 formó el 'Equipo 57' junto a Jorge Oteiza y Agustín Ibarrola, entre otros, y en 1966 el 'Grupo Gaur' junto al propio Oteiza, Eduardo Chillida y otros artistas.

Hace dos meses fue Ramiro Pinilla, el gran escritor 'escondido', quién dejó un poco más huérfana a la cultura vasca. El escritor vasco (Bilbao 1923), autor de novelas como 'Verdes valles, colinas rojas', 'Las ciegas hormigas' o 'Aquella edad inolvidable' murió el 23 de octubre a los 91 años. En su extensa carrera Pinilla, se convirtió en uno de los narradores en castellano más sobresalientes del País Vasco y en un referente de la narrativa renovadora de las letras españolas. En una entrevista a eldiarionorte.es a principios de año, el novelista se sinceraba en una charla llena de vitalidad: “Yo no entiendo la literatura como oficio. Es una vocación, es un juego, es un refugio, como quieras, pero no es un oficio”, decía tajante.

La muerte de Álex Angulo sacudió a mundo del cine el pasado 20 de julio a los 61 años. El actor vasco falleció en un accidente de tráfico en La Rioja cuando se dirigía al rodaje de ‘Bendita calamidad’ en Zaragoza. Las reacciones de sus compañeros no tardaron en llegar: “No me lo puedo creer. Estoy en bus volviendo a Madrid... No sé qué hacer”, escribía Álex de la Iglesia en Twitter. También Unax Ugalde manifestó en esta red social su estupor esta noticia: “Álex Angulo nos ha dejado. DOLOR! MUCHO!”. Este dolor se convirtió días después en un sentido homenaje de la profesión en el Teatro Campos Elíseos de Bilbao, en un acto conducido por su compañero y amigo Ramón Barea.

“Venceréis pero no convenceréis”, la celebre frase de Miguel de Unamuno sigue vigente 150 años después del nacimiento del intelectual que gozó de fama universal en vida. Diferentes actos han recordado la figura del autor de 'Paz en guerra' y 'San Manuel Bueno Martir'.

Este año también la asociación Imanol Oroituz ha terminado con diez años de homenajes en los que han querido “resaltar la figura de Imanol como persona y la aportación que hizo a la cultura vasca, porque le habían desplazado de su sitio”. Una década de conciertos, mesas redondas y charlas para recordar la figura del cantautor que tuvo que abandonar el País Vasco al recibir amenazas de muerte por parte del entorno de ETA. El 8 de noviembre un concierto con músicos, cantantes y bertsolaris, cerró este círculo de homenajes.

Etiquetas
stats